martes, octubre 30, 2007

El otro viaje.

Hacía escasamente un mes....maldito mes...Había perdido la vista...No importan las etiquetas...Había ojos....No había visión....A veces la vida tendría que tener otro final...Malamente podía caminar por culpa de una úlcera y no veía nada...no importaba la distancia, no diferenciaba ni la luz...Así que ahí estaba en su sillón, sentado en una sala agradable sin poder disfrutar de la misma...Todo se había perdido...su colección de fotos antiguas, sus sellos, sus postales....Todo se quedaría ya en aquel baúl hasta nunca jamás...

Su mirada seguía siendo como la de alguien que quiere ver...Sus ojos azules, tan azules que te llevan al cielo...su porte elegante y tantos años que ya no cabían en carnet de identidad...Hablaba con tanta tristeza, tanta melancolía que era mejor que no viese nuestras caras, mejor que no viese las lágrimas de frustración de su esposa...porque ninguno eramos capaces de mantenerle la mirada sin querer comenzar a llorar....Todas sus palabras eran tan coherentes, tan sabias y tan honestas....Le habían dicho que comenzase a vivir de los recuerdos...¿ cómo alguien podía decir eso?, ¿ cómo alguien puede atreverse a sugerirlo?....¿ no hay ninguna forma de ver un poco?, ¿ solo un poco?....Y se te pone un nudo en la garganta, un silencio incómodo....una respuesta vaga....Y entonces dice que bajar a la calle sin poder ver, sin ver quien pasa a tu lado, sin poder ver las caras de tus nietos;no es lo mismo....Y sabes lo que va a pasar, sabes que su historia pasará al archivador de los casos perdidos...Damos algunas indicaciones y nos despedimos...Le doy la mano y no la suelta, mi mano queda unos instantes entre las suyas...La mía es fina con dedos largos, las suyas están gastadas pero siguen siendo firmes y transmiten confianza...y en ese momento se te rompe un poco el corazón...y piensas en que toda la belleza de las últimas semanas no significa nada comparada con el privilegio de sostener sus manos...y deseas que llegue el día en que los ciegos reciban la vista...y que el final no sea siempre igual...

miércoles, octubre 17, 2007

Paris.

Paris es una de esas ciudades eternas. No pasan de moda, siguen intactas al paso del tiempo y su belleza permanece intacta a pesar de la polución, el tráfico, la superpoblación y las guerras cotidianas. Paris es de los pocos lugares en los que duele mirar durante un rato...parece que los bastones y conos son incapaces de transmitir todas las improntas al nervio óptico...Hoy la torre Eiffel me acogió por unas horas...preside la ciudad con solidez sin preocuparse por el clima...Grandes avenidas,parques,monumentos, arcos, puentes, barcos, coches, gente...mucha gente allí abajo...Y Paris sin inmutarse al movimiento...creo que es ella, la niña bonita, a la que envidian el resto de las capitales europeas...por mucho que el resto de las capitales traten de imitarla...siguen a un abismo de su belleza...Así que aún a pesar de la huelga, a pesar de la mala gestión de la información durante la misma, a pesar del frío y de tener que enterarme del divorcio de Sarcozy en contra de mi voluntad...A pesar de eso....me sigue gustando Paris.

sábado, octubre 13, 2007

500 miles.

Sonó esa canción, una docena de veces mientras recorríamos carreteras poco transitadas...Los tres cantábamos...Subíamos el volumen y hacíamos el tonto en el coche...sintiendo que el mundo era un poco menos nuestro y la vida un poco más intensa...Ver lo bueno y lo malo tan cerca, da que pensar...La esclavitud, el racismo, la opulencia, la riqueza...todos hijos de la misma tierra y con un destino tan distinto...Y el mismo precipicio, el mismo salto...¿Haremos el bien o haremos el mal?....¿Amaremos u odiaremos?....¿Cual elegiremos como nuestro camino?....Y entre todas esas preguntas, esa canción...

When I wake up, well, I know I'm gonna be,
I'm gonna be the man who wakes up next to you.
When I go out, yeah, I know I'm gonna be,
I'm gonna be the man who goes along with you.

But I would walk five hundred miles,
And I would walk five hundred more,
Just to be the man who walked one thousand miles
To fall down at your door.

When I'm working, yes, I know I'm gonna be,
I'm gonna be the man who's working hard for you.
And when the money comes in for the work I do,
I'll pass almost every penny on to you.

When I come home, oh, I know I'm gonna be,
I'm gonna be the man who comes back home with you.
And if I grow old, well, I know I'm gonna be,
I'm gonna be the man who's growing old with you.

But I would walk five hundred miles,
And I would walk five hundred more,
Just to be the man who walked one thousand miles
To fall down at your door.

When I'm lonely, well, I know I'm gonna be,
I'm gonna be the man who is lonely without you.
And when I'm dreaming, well, I know I'm gonna dream,
I'm gonna dream about the time when I'm with you.

When I go out, well, I know I'm gonna be,
I'm gonna be the man who goes along with you.
And when I come home, yes, I know I'm gonna be,
I'm gonna be the man who comes back home with you,
I'm gonna be the man who is coming home with you.

But I would walk five hundred miles,
And I would walk five hundred more,
Just to be the man who walked one thousand miles
To fall down at your door.

Y conforme los años han pasado sigue en mi mente esa canción....Y ahora la tendrás que hacer tuya, tendrás que recorrer 500 miles and 500 miles more....Y five hundred son muchas millas....mucho tiempo, mucho esfuerzo, muchos sucesos....pero merecerá la pena porque el amor gana...el amor gana siempre que tú recorras one thousand miles to fall down at her door...Fue un día maravilloso, espero que NY no os decepcione...

jueves, octubre 11, 2007

La escala.

Dos lavadoras, sábanas limpias en toda la casa, dejas la mochila, coges la maleta, llevas los zapatos de tacón, ropa para diez días, jerseis de cuello vuelto, el anorak y el vestido rojo...Esto promete aunque el escenario sea el de siempre...Bruselas, nos estamos haciendo amigas...Muchos kilómetros al norte y un día, un día único...Allá vamos...

martes, octubre 09, 2007

Ella, la Alhambra.

L. dice que no debes perder lo mejor por disfrutar cosas buenas...Está bien escribir, está bien sacar fotos pero...si por hacerlo nos perdemos una buena conversación, disfrutar de un café viendo el cielo o estando de verdad en un lugar entonces el resto no es lo que tienes que hacer en ese momento...Estuve algunas semanas pensando en ese concepto pero lo puse en práctica sin querer....Justo en la Alhambra mi cámara donada por J. se estropeó...no camara, no foto....Ella y yo...bueno ella, yo y unos cuantos miles de personas más....

Así que la miras, la vuelves a mirar y piensas si es de verdad...Al principio la miras con un interrogante,con un poco de vergüenza por entrometerte en sus ventanas pero luego te conquista y dejas la modestia para mirarla con descaro,con animación, con verdadera admiración y quieres que se quede ahí, en la retina, quieres que sigue indemne en la memoria...Hermosa, alta, fuerte, dulce, elegante...Quieres que cuando el invierno llegue, ella siga mirándote como en este momento...porque te ha conquistado, ya no puedes volver atrás...no importa que no tengas cámara, no importa que no tengas palabras...La Alhambra ya es una parte de ti...Tocas esas paredes que tantas manos han tocado siglos atrás...son aterciopeladas, cálidas y firmes...y la música empieza a sonar en tu cabeza y bailas....bailas hasta que se pone el sol.

lunes, octubre 08, 2007

Granada.

He tenido un flechazo con Granada, ha sido intenso,me ha dejado sin aliento y con los ojos bien abiertos. Ocurrio nada mas llegar y poco a poco ha crecido mi amor por esta ciudad escondida en las montanhas. Sus calles entre cuestas, el Albaycin, sus pequenhas iglesias del medievo...Sus tiestos en las ventanas, sus graffitis llenos de ingenio...y su arte, la ciudad tiene duende...Hay cosas inimaginables, hermosas y simpaticas...Un japones tratando de imitar flamenco en un parque cuando se sienta a su lado un jardinero y comienza a cantar el cante hondo...En otros lugares el flamenco parece un anuncio publicitario pero aqui tiene sentido, es dulce; apasionado y lleno de imaginacion...visceral...Ha logrado en buena parte desechar mis prejuicios...Y la Alhambra...ella se merece un enunciado por si misma...

Ps. Teclado anglosajon.

sábado, octubre 06, 2007

Córdoba.

Córdoba es distinta. No tiene la solera de su antecesora ni la fama de la próxima parada pero tiene algo. Córdoba me gustó. Reconozco que iba predispuesta por los comentarios de D. pero no me importó.

Me gustaron sus callejuelas estrechas, su puente de siete arcos, sus gentes afables, el sonido de los caballos caminando sobre sus piedras, su mezquita catedral...La gente caminando por todas partes, una ciudad que se mueve, una ciudad en la que podría vivir...En el fondo, el problema ( mi problema) es imaginarme las ciudades como hogares temporales que podrían ser definitivos dando unas cuantas vueltas por eso algunos lugares me generan amor u odio de forma visceral y no racional...por eso me siento cómoda en Córdoba, la gente vive dentro de su ciudad y la disfruta...no hay tantos gritos en los bares, hay actividad sin estrés, pasan cosas pausadamente... Córdoba es como un caramelo en una tarde aburrida, te permite apreciar lo que quieres aunque no lo tengas...





jueves, octubre 04, 2007

miércoles, octubre 03, 2007

Sevilla.

Sevilla es.

Tenía una extraña mezcla en la cabeza acerca de esta ciudad, unos pocos recuerdos y mis pantalones de pitillo de hace mucho tiempo así que esta nueva aproximación, con mapa y sin familia, ha sido diferente.

He descubierto que los sevillanos hacen concursos para pronunciar el menor número de letras posibles lo cual es todo un reto lingüístico. Todo comenzó cuando el recepcionista del albergue nos dijo " zi nós importa voa zubir el volumen porque me guzta muzho ezta canzió" así que el hombre subió la radio a toda mecha escuchando un flamenquillo difícil de escuchar. Todo esto mientras observábamos que tenía un "bulto" en el cuello un poco extraño y tildaba a unas pobres japonesas de " que poca chizpa tienen alguna" mientras les decía " diz is for yu"...Lo cual rozaba un fotograma de cualquier comedia.

Poco más tarde nos dirigimos hacia el centro para caminar un poco alrededor de la Giralda y sus callejuelas. Una visita plácida hasta que nos sentamos en un bar a tomar unas estupendas tapas ( viva las tapas de esta ciudad). Allí pudimos observar los buenos modos de algunos ciudadanos. Un hombre de unos sesenta años, se quita el chicle de la boca y lo pega debajo de la mesa sin ningún reparo ante nuestras miradas atónitas. Lo peor fue que cuando se iba a ir, hizo un pequeño amago de rescatar nuevamente el chicle, lo cual fue insólito.

Sevilla no es mi ciudad. No me gustan los toros. No me gusta el flamenco. No me gusta sus calles sucias. No me gusta lo poco cuidados que están los márgenes del Guadalquivir. No me gusta su extremo ruido y no me siento acogida en ella. Me siento una extraña rodeada de movimiento pero...El Real Alcazar cambió un poco todas esas emociones...El Alcázar te devuelve la ingenuidad de experimentar la belleza, sus patios, sus azulejos, sus estrellas, su cúpula dorada...Es hermosa, es muy hermosa...Me recordó una idea, una misma idea, cuando dejé de asombrarme ante lo que me rodea, estaré muerta..Cuando deje de percibir lo extraordinario, el mundo se disolverá poco a poco...Es la belleza la que nos devuelve una milésima mirada de Él como una estrella en un vasto océano...y esa es la razón por la que a veces me siento viva, muy viva.