miércoles, abril 29, 2009

Amor y demencia, segunda parte.

Está en una camilla. Es una mujer mayor, grita. La llamo por su nombre mientras le explico que es necesario sacarle sangre. Sirve de poco, sigue agresiva con una mirada fría y llena de desconfianza. Las enfermeras realizan las órdenes médicas y sé que he sido yo la culpable de sus pinchazos. Una vez con el camisón puesto, la vía colocada y la manta sobre su cuerpo, se agarra a la barandilla de la cama. Permanece inmóvil, desconsolada. Y sé lo que tengo que hacer.

Llamo por el altavoz a su familia. Acude su marido. Me mira con interrogantes mientras entra en el box para darle la mano a su mujer. Le da la mano con lentitud, parece una película de cine mudo. Y todo cambia. La mujer relaja sus facciones y una ola de paz inunda su rostro. Acerca la mano de su marido hacia su cara y cierra los ojos con una serenidad que me deja sin aliento. Trago saliva. Comienzo a explicarle al marido la sospecha clínica. Lo explico cuando el marido comienza a hablar.

Y habla. Habla como un primer plano ante una cámara. Habla con los ojos vidriosos por las lágrimas. Es tan difícil, tan difícil. Al principio la enfermedad era lenta, pequeños olvidos, palabras repetidas pero poco más. Han pasado ocho años. Ocho años. Es mi mujer. Y permanece callado, trago saliva nuevamente mientras me repito que no puedo llorar. No puedo llorar aquí. Pongo mi brazo sobre su hombro mientras el hombre trata de mantener la compostura.

Nos dieron una residencia de día pero no pude llevarla. No podía dejarla allí, ella es mi señora. Así que empecé a darle paseos por el pasillo, a leerle en voz alta y a enseñarle a coger la cuchara. Nuevo silencio. Es muy duro, muy duro. Y hoy, hoy no sabía que más hacer. Yo no quiero traerla al hospital pero la ví mal. Todas las noches, me coge la mano antes de quedarse dormida pero esta noche no lo hizo y eso me asustó. Siempre me da la mano en la cama desde hace setenta años. A mí no me importa que la ingresen si es necesario, yo me quedaré con ella todo el tiempo. Sólo quiero que esté bien. Que esté bien. Entonces toca la cara de su mujer con dulzura,sus manos gastadas recorren las arrugas y parece una mujer distinta a la que entró minutos antes. Cuando la acaricio, se calma. A veces, se pone a gritar y la acaricio. Entonces se tranquiliza y apoya su cabeza sobre mi hombro. Parece que me reconoce, yo quiero creer que me reconoce.

Asiento en silencio. Le acerco una silla y le permito permanecer junto a su mujer el resto del tiempo. No tengo palabras.

martes, abril 21, 2009

Se aceptan sugerencias.





_Todo tipo de sugerencias, especialmente porque no uso tacones.

lunes, abril 13, 2009

Mr. Gruñón.

Mr. Gruñón tiene 63 años. Viaja con su mujer y dos hijos adultos. Probablemente haya estado en un hotel de 5 estrellas y su experiencia sea todo menos rusa. Nada más embarcar Mr. Gruñón le dice al azafato que quiere un asiento más cómodo. Sus 80 kg y 1,80 metros de estatura merecen otra cosa. El azafato le dice muy amablemente que si queda un asiento libre, se lo cederán. Al resto de los 130 pasajeros, no nos lo cederán. Antes de despegar todos los asientos están ocupados así que Mr. Gruñón permanecerá en el asiento 9C pasillo. No está conforme. El azafato le consuela diciendo que puede extender las piernas en el pasillo. Pequeño gruñido.

Tras 30 minutos de vuelo, Mr. Gruñón pregunta si piensan darnos algo de comida. El azafato responde que en un momentito. Mr.Gruñón comienza a echar pestes con su hijo que se encuentra situado en el 9D. Finalmente llega la cena, rusa pero cena. Nueva hornada de quejas. Primero, sirven los menús especiales antes del suyo. Nuestro azafato o héroe por un día le indica que en un ratito será servido. Nuevo gruñido. Llega el menú, no le convence. ¿No tienen otra comida? No. Nueva queja. A pesar de ello se lo come todo un campeón, no vaya a ser que le regale a Iberia un sobre de sal sin usar. Llega la hora del café. Nuevo problema, tiene que beber el café con los restos de comida porque no le han retirado la bandeja. Nueva llamada a nuestro héroe por un día que mantiene estoicamente la sonrisa mientras le dice que es cuestión de organización. Nueva queja. Por supuesto Mr. Gruñón recibe todo antes que el resto de viajeros de la fila 9. Finalmente tras el café ( 40 segundos tras acabarlo), solicita un vaso de agua. !Qué menos, que agua!. Nuestro héroe por un día permanece con una sonrisa eterna y le da el agua pero...Mr. Gruñón considera que es hora de pasar a la acción y repite una tras otra sus quejas para pedir un formulario de reclamaciones...Llega el formulario pero no le convence el formato...Uhmm...Finalmente lo rellena de forma concienzuda y avisa por enésima vez al azafato...Le da el formulario y vuelve a reclamar "sus derechos" (...¿derechos en clase turista?, ¿derechos por 80 euros ida y vuelta?...)...Y nuestro héroe por un día vuelve a ser humano y responde firmemente, la solución es viajar en primera clase...Nuevo gruñido...


_A nuestro héroe por un día: gracias, es usted un tipo estupendo.

domingo, abril 12, 2009

Otra cosa.

San Petersburgo es otra cosa. Tiene un sabor europeo que no te permite sentirte extranjero. Sus canales, sus puentes, sus edificios imperiales vestidos de colores. No hay nada pequeño, nada dejado al azar. Todo ha sido pensado, vivido, analizado. La vida transcurre al paso adecuado y la luz lo llena todo. La noche cae pasadas las 11 pm y eso le da carácter, es una forma discreta de decir estoy aquí, miradme y no podréis apartar la vista.

El Hermitage es la joya de su corona. Todo el edificio es digno de ser admirado. Una reverencia se asoma en mi mente, estás ahí, estoy aquí. No hay lugar para la improvisación, todas las salas han sido diseñadas con el esmero propio de su lugar. Las pinturas alojadas allí son una colección magnífica...Tras ver sus salas, sólo puedo asentir ante la frase de uno de sus directores...." Puede que el Hermitage no sea la primera pinacoteca del mundo pero desde luego no es la segunda"...Hay tantos cuadros, tantas firmas que llega a abrumar...La belleza debería estar dosificada para no intoxicar, para mantenernos humildes....Y Rembrandt parece trascender a su época con el regreso del hijo pródigo...Su tamaño, sus detalles, las caras, los gestos, el tacto...merece cientos de libros pero me quedo con las palabras de Nowen*..."a Father who has stretched out his arms in merciful blessing, never forcing himself on anyone, but always waiting; never letting his arms drop down in despair, but always hoping that his children will return so that He can speak words of love to them and let his tired arms rest on their shoulders (...). The Father wants to say more with his touch than with his voice, good things of his children. He has no desire to punish them. They have alredy been punished excessively by their own inner or outer waywardness. The Father wants simply to let them know that the love they have searched for in distorted ways has been, is, and always will be there for them. the Father wants to say, more with his hands than with his mouth: You are my Beloved, on you my favor rests"...Amén...Esa es la imagen que por siempre quedará en mí de esta ciudad....

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* Nowen H., The return of the prodigal son: A story of homecoming.

sábado, abril 11, 2009

viernes, abril 10, 2009

Los moscovitas.

1. No entran en mi definición de amables.
2. No importa lo amable o desesperado que estés, te ignoran de forma premeditada.
3. Comprar dos billetes de tren a San Petersburgo supuso: 10 estaciones de metro, 2 estaciones de tren, 6 señoritas que no leyeron nuestro papel en medio ruso con todos los detalles, un policía que tonteó con las 6 señoritas mientras ellas se tocateaban el pelo con cara de angelitos…”es posible comprar aquí el billete” ( uhmm…os va a crecer la nariz como a Pinocho). Una chica que escribió una carta en ruso ( “ Ruego encarecidamente que vendan un billete de tren a estas pobres jóvenes que no hablan ruso”…¿ dependemos de la beneficencia?). 1 señorita que nos envío a una nueva ventanilla y finalmente a la 8ª señorita que nos vendió los billetes….Faltaba el eslogan: “ En Moscú, todo son facilidades”.
4. Raramente llevan ropa de colores…todos los colores que usan llevan acoplada la palabra “oscuro”…verde oscuro, azul oscuro, gris, negro…los colores se quedaron en las iglesias.
5. Su expresión emocional es casi plana…no hay besos, no hay abrazos, no hay gestos dulces, no hay…
6. Tienen un componente machista que me pone los pelos de punta. No, gracias. No, gracias. No, gracias. Después de experimentarlo en mis propias carnes, había decidido gritar. No es justificable. No es válido. Me quedo con las palabras de mi padre, no son de fiar. No lo son si eres una mujer, es triste…no por mí….por las que viven allí…lo siento, lo siento muchísimo….la dignidad de una persona es otra cosa y no lo que yo viví en el metro moscovita.
7. Fuman, fuman mucho…no hay clase social que escape al tabaco….todos fuman y mucho…
8. Su concepto del bien difiere del mío…su bien es la no ayuda…Y por eso Anna tenía razón…por eso ocurre lo que ocurre…porque cuando el bien es la ignorancia, el mal es impune….los derechos humanos son pisoteados…Y la única esperanza consiste en dar un paso hacia el bien, hacia el verdadero bien…reconocer al prójimo….respetarlo y defender su derecho a existir…Y defenderlo, defenderlo con la vida….por eso Anna está muerta y Rusia enferma*.


* Anna Politkovskaya, Diario ruso. Frase tomada del prólogo de la edición española.

jueves, abril 09, 2009

miércoles, abril 08, 2009

martes, abril 07, 2009

Kremlin.

El Kremlin es uno de esos lugares que hay que visitar, aunque sólo sea una vez en la vida. Rodeado de una muralla roja parece un secreto bien guardado. ¿ Por qué las murallas no son siempre rojas?. Las seis iglesias en su interior rompen mis expectativas. Me sigue sorprendiendo la luz...Las murallas son rojas y la luz parece llenarlo todo...¿Es esto posible?...Parece serlo, tengo la sensación que estas son las iglesias en las que me gustaría estar...quedarme, permanecer acostada en el suelo mientras veo las bóvedas no muy altas llenas de colores...Dejar pasar las horas allí, no preocuparme por si mis piernas estás dobladas o si llevo un paño en la cabeza...simplemente respirar, respirar hondo...Eso sería lo que deberían ser esos lugares...lugares llenos de paz....Los colores tan vivos son lo opuesto a las ropas grises que la gente lleva en estas latitudes....y parecen tocarme la cara, parecen susurrarme con discrección...vive, vive, vive con intensidad...no te pares, sigue, sigue adelante....y en cada iglesia que entro,siento lo mismo...esto es real...real...esto es sólo un susurro de lo que es la Vida y sonrio...¿Cómo he tardado tanto en encontrar 6 iglesias rodeados de una muralla roja?....

lunes, abril 06, 2009

La plaza Roja.



La plaza Roja trae muchas ideas a mi cabeza...Quizás la más permanente es su grandiosidad...Resplandece en medio del asfalto...Los colores, los contrastes...La vida en estado puro...El sueño de un gobernante para celebrar una batalla...muchas cosas...muchos muertos...Una iglesia llena de colores, pequeñas salas que relatan historias...historias importantes,vivas...Un lugar estupendo para disfrutar de distintos espacios, para buscar lo eterno, para recordar que Lenin sigue muerto...no queda nada de ese hombre en este lugar, sus ideas son ya historia en esta Rusia...El tiempo ha dado su dictamen y la vida, la Vida es sin duda otra cosa.

domingo, abril 05, 2009

IB308.


El día ha sido tranquilo. Las maletas están en su lugar. Las bufandas, las botas, los gorros y un billete. Destino: Moscú. Una semana sin pacientes. A nadie le va a doler nada. El embarque se efectúa con tranquilidad. El capitán del vuelo da la bienvenida. 2ºC en el lugar de llegada. 20ºC en Madrid. Podría ser peor. Pocos minutos más tarde, vuelve a hablar. Un motor no funciona,los mecánicos lo arreglarán manualmente. Un murmullo generalizado. El capitán parece escucharnos y dice que es algo sencillo.
Acto seguido, lo traduce al inglés de forma alternativa. Dice que hay un pequeño problema ( ¿¿ qué un motor no funcione entra en la categoría de un pequeño problema??...Bendita la ignorancia...). que los ingenieros solucionarán brevemente ( ¿los mecánicos pasan a ser ingenieros en menos de 60 segundos?...como se entere el Ministerio de Educación, les va a caer el pelo).

Media hora más tarde, estamos ya en el aire cuando nuestro amigo el capitán rompe el silencio con otro mensaje fundamental...Nuestro destino es Pamplona....( ¿¿Pamplona??...¿¿ 3 jerseys, 2 bufandas, 6 pares de calcetines de invierno para ir a Pamplona??...¿¿ nos hemos equivocado de avión??)....El capitán retoma el aliento y prosigue...Pamplona, Tolouse, Viena, Praga en Chequia, Minsk en Bielorusia, la estepa rusa y finalmente Moscú....Esta clase gratuita de geografía a la 1 am me ha dejado confusa...¿ había aprobado geografía en 2ºde BUP o este viaje es una especie de repesca?...

Cuatro horas más tarde, la nieve rodea a Moscú. Hemos llegado.