martes, abril 22, 2008

Huérfanos en mi cómoda.

Sólo ocurre algunos días, cuando abro la bandeja donde están todos esos pendientes. Y los veo solitarios. Han pasado a la historia. No llegan a diez pero no logro deshacerme de ellos. Me han acompañado en algunos momentos. Nadie les suele prestar atención pero yo sé que ellos están ahí, conmigo. Sólo observan y hay algo que me impide apartarlos. No sé bien el qué pero siguen en las esquinas esperando volver a salir. Esperando que su pareja de baile vuelva del metro, de la playa, de la sombra de la catedral. Y hoy al dejar mis pendientes tostados, pensé en los demás. Y pensé en los días especiales que vivieron a mi lado, pensé en el lugar donde los compré y pensé en lo rápido que pasa el tiempo....y pensé que, en cierto modo, cada uno somos un poco como ellos...cada uno tratamos con un determinado tema a lo largo del tiempo...le damos vueltas, lo ponemos del derecho, del revés, hablamos, explicamos, nos enfadamos hasta que finalmente podemos vivir con ello....no escogemos el tema con el que dar vueltas pero las damos, toda la vida encaminada a vivir con cierta situación, cierta idea, cierta persona, cierto dolor, toda la vida girando hasta que logramos encontrar el color que nos permite apreciar con nitidez aquello con lo que convivimos tan de cerca...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

gracias por escribir...jooooo!!!!
voy a imaginar q algunos dias lo haces para mi....mil gracias por permitirnos fijarnos en los detalles....

Sara. dijo...

Gracias por mi chapa, mi camiseta se ha llenado de orgullo por esta compañía y yo también...Mil gracias...skydiving para todos...bicos....