jueves, octubre 12, 2006

Otoño 2.

...o el porqué la vida puede ser maravillosa....

Si una mañana te levantas sin prestar atención al despertador, desayunas croissants recién hechos y un bol con Wheetabix...si sales a la calle y paseas por las callejuelas que rodean la Grand Place de Bruselas...si te vas a visitar la casa de Horta mientras piensas en los amigos que aman la arquitectura y la decoración...si te quedas sorprendido con unas escaleras y con el color de una ciudad bajo la lluvia.

Si disfrutas de un gofree y un buen té en un café íntimo donde suena jazz mientras la gente parece plácida en sus conversaciones... Si entras en una iglesia donde ves que hay un poco de vida entre sus antiguas piedras, si te sorprende ver un panel lleno de oraciones y un deseo de trasmitir la belleza de Dios a través del arte.

Si cenas un plato de pasta en una mesa con velas mientras tienes una buena conversación con personas que amas. Si aprendes palabras como "mill" mientras ves 30 mills a tu alrededor. Si ves algo más de Magritte y descubres personajes interesantes como Bas Jan Ader quien plasma frases como " Thoughts unsaid then forgotten" en una pared blanca iluminada con un foco y con una triste maceta de geranios como único acompañante.

Si paseas por el Rijsmuseum cuando seis años antes te prometiste que algún día lo visitarías y por fin vives ese día. Si cruzas los canales de Amsterdam como un niño con zapatos nuevos. Si redescubres lo bordes que pueden ser los ciclistas cuando invades su carril y te ríes porqué se toman la vida demasiado en serio. Si cierras los ojos y te comes un chocolate Godiva saboreándolo lentamente. Si lees los pensamientos del dr. Brand y recuerdas que hay otras formas de hacer medicina.

Si haces todo eso de forma pausada, observando los pequeños detalles...Descubres que la vida puede ser maravillosa, que entre tanto ruido también puede haber calma y que solo si prestamos atención podremos ver la letra del Eterno a través de lo cotidiano. Por eso a veces la vida es maravillosa.

Ps. Roberto, espero que pronto os animéis a hacer el mismo recorrido que yo y podáis compartir esta experiencia, un abrazo a la family.

2 comentarios:

Jairo dijo...

Me alegro de que hayas disfrutado de tu visita por estas tierras, y eso a pesar de sigas prefiriendo Amsterdam a Bruselas.

El otoño, el invierno, ... y la vida entera se vuelven un regalo maravilloso cuando aprendemos a disfrutar de las pequeñas (y grandes) cosas y sobre todo cuando tenemos a alguien con quien compartirlas.

Gracias por tú regalo de cumpleaños (tú va con acento a propósito, que es pronombre en este caso)

Bicos.

Sara. dijo...

Uhmmm...Bruselas también me gusta pero Amsterdam....es algo diferente...logra despertar mis sentidos...pero me ha encantado el Perroquet, el lavabo al revés, la casa de Horta y Magritte forma parte de mi vida...eso se lo debo a Bruselas y a ti. Gracias por acogernos y darme algunas pistas de lo que te rodea. Bicos, te echo de menos.