viernes, enero 05, 2007

Recuerdos.

Volví a perder el tren por segunda vez en el día, me cayó un pendiente al suelo de forma que la carrera quedó interrumpida, toqué el botón de apertura cuando el tren se puso en marcha.
Caminé hasta el final del andén, bebí un poco de agua cuando vi acercarse a una familia. La benjamina de la casa tendría cinco años y era incapaz de estarse quieta. No paraba de mover sus pies formando círculos en el suelo. Hablaba con entusiasmo bajo la mirada complaciente de sus padres y hermanas, hacía bromas absurdas y sus padres le pedían que no hablase tan alto.
Llego el tren y todos subimos en él. Seguí leyendo un libro sin prestar mucha atención a los que me rodeaban hasta casi llegar a la parada definitiva. En ese momento la niña señalaba los edificios preguntado si era allí; vi a más niños de lo habitual todos ellos inquietos que daban pequeños pasos en el tren en marcha...Entonces me dí cuenta de qué día era hoy, el día de la cabalgata....Todos ellos bajaron de la mano de sus padres, parecían un pequeño ejército dirigiéndose al mismo lugar...Expectantes, sonrientes, inquietos...con adultos un poco más pasivos de lo que la ocasión merecía...Y recordé aquella sensación de ser más bajita, de ir de la mano de mi madre y de recoger caramelos que normalmente no me gustaban...Recordé lo extrañas que eran aquellas personas semi disfrazadas que decían venir de Oriente y recordé colocar los zapatos cerca de la ventana para ver como el día siguiente tenían alguna moneda de cinco pesetas....Uhmm, dulces recuerdos.....

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esperemos que consigan hacerlo algún día, es triste que les haya tocado vivir esa infancia, entre golpes e insultos.