jueves, octubre 30, 2008
domingo, octubre 26, 2008
El hombro.
No sé porque le atendí yo. Buscaba a otra persona pero finalmente se tuvo que conformar con el residente de turno, justo ese día era yo. Llevaba más tiempo del que esperaba con esa lesión. Más tiempo del esperable para sus 25 tacos. No sé porque escogió ese día para venir al hospital pero sí sé lo que dijo.
No me dejo hablar durante más de 10 minutos. Ni siquiera me contó su problema, sólo me contó lo que no estaba dispuesto a soportar. Me hizo partícipe de su resentimiento...resentimiento contra el sistema, contra las medicinas y contra el médico...resentimiento contra mí por ser la exponente de los tres puntos anteriores.
Y otra vez, otra vez escuchando todas esas quejas y mi mente empezó a hacerse algunas preguntas...no había quejas acerca de su hombro...¿ por qué no se quejaba de su hombro por no curar tan rápido como su mente quería?, ¿ por qué no se quejaba de no obedecer al consejo médico?, ¿ por qué no se quejaba de él mismo por no seguir el tratamiento que le correspondía?......¿ por qué soy yo la culpable?...
Y eso es lo que cansa...A veces me cansa....Me cansa porque no me genera empatía sino todo lo contrario...Me cansa porque me pone a prueba...Es fácil ser amable con quien también lo es o al menos con quien no me transmite agresividad...pero ser amable con alguien que sólo te trasmite odio....Es difícil...Difícil porque empleas más energía en entender lo que le sucede, empleas más tiempo mordiéndote la lengua y tratando de desenvolver lo que le rodea que en buscar una solución...Y eso es un problema....Un problema que no siempre tiene fácil solución....Poco a poco, me estoy dando cuenta que detrás de la agresividad, suele existir una vida miserable...Este chico tenía un contrato basura, un hijo al que mantener y una familia que apenas le hablaba....Su hombro era la gota que colmaba el vaso...Finalmente, la entrevista se encauzó un poco ( sólo un poco)...buscamos algunas soluciones y aunque no se fue contento por lo menos se fue más tranquilo de lo que llegó lo que me pareció un milagro....pero aún sigo preguntándome cómo manejar esa agresividad....cómo responder aún cuando no tengo todos los recursos para solucionar el problema...cómo ser creativa ante personas llenas de frustración....
No me dejo hablar durante más de 10 minutos. Ni siquiera me contó su problema, sólo me contó lo que no estaba dispuesto a soportar. Me hizo partícipe de su resentimiento...resentimiento contra el sistema, contra las medicinas y contra el médico...resentimiento contra mí por ser la exponente de los tres puntos anteriores.
Y otra vez, otra vez escuchando todas esas quejas y mi mente empezó a hacerse algunas preguntas...no había quejas acerca de su hombro...¿ por qué no se quejaba de su hombro por no curar tan rápido como su mente quería?, ¿ por qué no se quejaba de no obedecer al consejo médico?, ¿ por qué no se quejaba de él mismo por no seguir el tratamiento que le correspondía?......¿ por qué soy yo la culpable?...
Y eso es lo que cansa...A veces me cansa....Me cansa porque no me genera empatía sino todo lo contrario...Me cansa porque me pone a prueba...Es fácil ser amable con quien también lo es o al menos con quien no me transmite agresividad...pero ser amable con alguien que sólo te trasmite odio....Es difícil...Difícil porque empleas más energía en entender lo que le sucede, empleas más tiempo mordiéndote la lengua y tratando de desenvolver lo que le rodea que en buscar una solución...Y eso es un problema....Un problema que no siempre tiene fácil solución....Poco a poco, me estoy dando cuenta que detrás de la agresividad, suele existir una vida miserable...Este chico tenía un contrato basura, un hijo al que mantener y una familia que apenas le hablaba....Su hombro era la gota que colmaba el vaso...Finalmente, la entrevista se encauzó un poco ( sólo un poco)...buscamos algunas soluciones y aunque no se fue contento por lo menos se fue más tranquilo de lo que llegó lo que me pareció un milagro....pero aún sigo preguntándome cómo manejar esa agresividad....cómo responder aún cuando no tengo todos los recursos para solucionar el problema...cómo ser creativa ante personas llenas de frustración....
lunes, octubre 20, 2008
Fragilidad.
Son las cinco de la mañana, pocas horas para terminar la guardia. Un poco de descanso, los pacientes duermen y nadie está esperando atención médica. Voy al cuarto de médicos, está hecho un desastre con botellas de agua a medio acabar, restos de galletas y libros, libros por toda la mesa. Decido poner un poco de orden para matar un poco el sueño. Las botellas a la basura, los libros a la estantería...alguna pregunta de enfermería...nada muy interesante...Y entonces, encuentro un papel con la medicación de un paciente que no está en la urgencia ahora...Leo las pastillas pero al darle la vuelta hay algo que me toca un poco el corazón...unas palabras escritas a mano con letras grandes y mal hechas que ponen...Me llamo María Rosa, vivo en la calle....Esas letras de alguien mayor....alguien que probablemente esté viviendo ese viaje hacia atrás...hacia la pérdida de memoria...hacia la niñez con cuerpo de anciano....y entendí su miedo, su preocupación a no saber quien es o donde vive....y miré con tristeza ese pequeño grito para recordar quién era y cuál era su lugar...somos tan frágiles, tan frágiles que da miedo...
viernes, octubre 17, 2008
La carta.
Abrí el buzón. Esperaba la llegada de la carta. La carta donde están escritos los nombres de dos personas. La carta con la fecha, el lugar, los detalles. Esa carta no llegó hoy pero llegó otra carta distinta. El remitente no resultaba conocido, el consorcio de transportes no es lo que uno llama conocido.
Al recibir la carta pensé en todas las cosas que podría haber hecho mal. Toda carta inesperada supone un breve repaso por los posibles errores cometidos:Un rápido exámen de conciencia. No recordaba nada especial, nada a parte de cobrarme un bono de transporte que nunca llegué a recibir y que una semana más tarde abonaron a mi cuenta. Pero subsanado el error, adios muy buenas.
La carta me explicaba que había extraviado mi bono de transporte.La compañía metropolitana lo había encontrado, motivo por el cual me lo remitían. En medio de la carta había un bono a estrenar del mes de Octubre. No sé realmente que ha ocurrido pero estoy sorprendida. No he perdido el abono. No sé porqué me envían esa carta pero me ha hecho reír. No entiendo la burocracia pero no tengo porque entender todo lo que sucede...hay errores curiosos, ya me tiraré de los pelos la próxima vez que pierda el abono y nadie lo devuelva....mientras estaré esperando LA CARTA...
Al recibir la carta pensé en todas las cosas que podría haber hecho mal. Toda carta inesperada supone un breve repaso por los posibles errores cometidos:Un rápido exámen de conciencia. No recordaba nada especial, nada a parte de cobrarme un bono de transporte que nunca llegué a recibir y que una semana más tarde abonaron a mi cuenta. Pero subsanado el error, adios muy buenas.
La carta me explicaba que había extraviado mi bono de transporte.La compañía metropolitana lo había encontrado, motivo por el cual me lo remitían. En medio de la carta había un bono a estrenar del mes de Octubre. No sé realmente que ha ocurrido pero estoy sorprendida. No he perdido el abono. No sé porqué me envían esa carta pero me ha hecho reír. No entiendo la burocracia pero no tengo porque entender todo lo que sucede...hay errores curiosos, ya me tiraré de los pelos la próxima vez que pierda el abono y nadie lo devuelva....mientras estaré esperando LA CARTA...
miércoles, octubre 15, 2008
Dos caras.
Son dos imágenes. Dos caras de la misma moneda, la de la vida.
Un hombre joven con una enfermedad terrible que denigra todas sus funciones.
Un hombre anciano con muchas enfermedades crónicas que limitan su existencia.
El hombre joven está rodeado de su familia. En su familia, su hijo no le habla a su mujer. Su mujer no le habla a sus hermanos. Su hija no quiere saber nada del tema. Y le pregunto qué le ocurre, qué le ocurre hoy. Y me mira con resignación, su hijo me mira con frialdad y su mujer habla. Habla con ese tono contenido que traducido significa me voy a romper, me voy a romper en cien pedazos. Hago mi trabajo, no es demasiado complicado. Les explico la situación con seriedad. Sus hijos se van y solo queda ella. Entonces empieza a hablar, una historia larga, triste, solitaria. Y le digo que el futuro no va a ser fácil...Aún así, tendrán que garantizar que él reciba el cuidado necesario. Y ella lo sabe, ella le quiere, le quiere tanto que no sabe qué hacer...pero hay tanta tensión a su alrededor....amenazas, rencores, desprecios, conversaciones que nunca existieron...Y mientras, él se muere....se muere sin recibir una atmósfera de amor, de esperanza, de fe...
El hombre anciano está junto a su esposa. Sabe que no está bien. Sabe que los años pasados no van a volver. Él acaba ingresando en el hospital. Cuando le doy la noticia, manda a su mujer a casa..." Sabe, ella padece de los huesos, no puede estar aquí porque le duelen mucho los huesos"...Y ella le dice que no importa, lo importante es cuidarle...Ella me mira con ojos suplicantes, coge mi mano mientras me dice "Cuídele bien, por favor, cuídele bien"...Le digo que estará bien atendido, todo lo mejor que podamos....Y entonces, él me da el teléfono de cada uno de sus cuatro hijos para que les avise si se pusiese malo...Y ella me dice que volverá a primera hora de la tarde con alguno de los nietos...Y justo antes de que ella se vaya, él le pide un beso de despedida...y se besan de forma tierna y sentida...
_J&S, when I imagine you, I imagine you as this old couple who love so much each other that they think more in the other side than in their selves...Happy one-anniversary…
Foto: Post Secret
martes, octubre 07, 2008
Hoy.
Hoy me tomé un helado de chocolate blanco, naranja y azafrán...una etapa cerrada...un poco de lluvia...y mi querido otoño dándome los buenos días...hoy....
lunes, octubre 06, 2008
Olas y olas.
Estaba al fondo del muelle, pocas personas la conocían. Era una extraña para la mayoría que pasaba un mes al año en aquel pequeño pueblecito en pleno Atlántico.
Nadie sabía su nombre, ocupación o ideas. Su voz era casi un susurro, en la tienda de Emily solo compraba pan y mantequilla….La gente llegó a acostumbrarse a su presencia, formaba parte del paisaje.
Solía llevar una camiseta blanca con unos viejos vaqueros. El pelo recogido en una coleta mal hecha, los pies descalzos. Ella se sentaba al borde del muelle, observaba el mar moverse con una pasmosa decisión. Olas y olas.
Raras veces demostraba algún sentimiento, no solía haber sonrisas en su cara, tampoco malos gestos…Parecía inerte a aquel lugar. Solo, olas y olas.
Aquel verano fue como los anteriores, ella fue una ola más que batía en el rompeolas del muelle. El mes se fue y ella también pero nunca más volvió.
Nadie supo más de ella, nadie la echó en falta….quizás nunca había existido.
Años más tarde sus olas llenaron páginas de periódicos. Titulares que la nombraban la pintora más influyente del siglo… palabras necias que halagarían a cualquiera menos a ella. Ella era una ola más en aquel Atlántico suyo.
Olas y olas.
( Guardado en el baúl de los recuerdos encontré este cuento).
Nadie sabía su nombre, ocupación o ideas. Su voz era casi un susurro, en la tienda de Emily solo compraba pan y mantequilla….La gente llegó a acostumbrarse a su presencia, formaba parte del paisaje.
Solía llevar una camiseta blanca con unos viejos vaqueros. El pelo recogido en una coleta mal hecha, los pies descalzos. Ella se sentaba al borde del muelle, observaba el mar moverse con una pasmosa decisión. Olas y olas.
Raras veces demostraba algún sentimiento, no solía haber sonrisas en su cara, tampoco malos gestos…Parecía inerte a aquel lugar. Solo, olas y olas.
Aquel verano fue como los anteriores, ella fue una ola más que batía en el rompeolas del muelle. El mes se fue y ella también pero nunca más volvió.
Nadie supo más de ella, nadie la echó en falta….quizás nunca había existido.
Años más tarde sus olas llenaron páginas de periódicos. Titulares que la nombraban la pintora más influyente del siglo… palabras necias que halagarían a cualquiera menos a ella. Ella era una ola más en aquel Atlántico suyo.
Olas y olas.
( Guardado en el baúl de los recuerdos encontré este cuento).
sábado, octubre 04, 2008
Perlas de la consulta.
- Usted, ¿ recuerda a Heidi?.
- Sí.
- Tenía la cara toda roja,¿ verdad?. Pues esto es lo mismo.
---------------------------------
- ¿ Mis piernas llenas de varices no tienen solución?.
- Sí, claro. Se cuelga usted boca abajo como los murciélagos y no le pasaría esto. Y si de paso se deja crecer las uñas, ya tiene la vida solucionada.
--------------------------------
- ¿ Y no me puede adelantar la cita? Mire que ya son 90 años y claro con las listas de espera... cualquier día uno no llega.
- Sí, somos muchos y alguien se muere en la lista de espera...pero tranquilo que eso no le va a pasar a usted.
-------------------------------
Este humor ácido en la consulta me supera.
- Sí.
- Tenía la cara toda roja,¿ verdad?. Pues esto es lo mismo.
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- ¿ Mis piernas llenas de varices no tienen solución?.
- Sí, claro. Se cuelga usted boca abajo como los murciélagos y no le pasaría esto. Y si de paso se deja crecer las uñas, ya tiene la vida solucionada.
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- ¿ Y no me puede adelantar la cita? Mire que ya son 90 años y claro con las listas de espera... cualquier día uno no llega.
- Sí, somos muchos y alguien se muere en la lista de espera...pero tranquilo que eso no le va a pasar a usted.
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Este humor ácido en la consulta me supera.
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