jueves, diciembre 30, 2010

2011.

Hay quien desea que se acabe pronto el año, quien desea que los malos días se borren en cuestión de segundos..... Hay otros que desean saborear cada momento, cada detalle...pensando que ya no volverá....Y quizás debiéramos ponernos en medio...Entre lo bueno y lo malo...Entre lo que nos sucede y lo que nos sucederá....Y pensar que todo tiene su momento...Todo tiene su precio...Todo tiene su valor....Y su valor es insospechado....Eterno, verdadero y lleno de esperanza a pesar de todos los peros....Así es como veo este año y como quiero ver el que vendrá.......

viernes, diciembre 24, 2010

Árbol

Faltan tres días para la Navidad. Decido estrenar unos pendientes rojos que alguien me ha regalado. Decido poner en práctica las clases que I me dió en los años universitarios. Si quieres ponerte unos pendientes rojos deberías usar algo rojo en tu atuendo. Resuenan los recuerdos y me pongo un jersey rojo de cuello vuelto. Salgo de casa, hay más personas en el tren de lo habitual y también más bolsas. No hay gorros de Papa Noel entre los viajeros, no hay ningún valiente con jersey rojo...a veces somos demasiado previsibles.
El día de hoy es accidental, los pacientes van y vienen. Les deseo Feliz Navidad, recibo buenos deseos y algún par de besos. Repito la misma frase "Feliz Navidad" y la respuesta es distinta "Parece usted un árbol de Navidad". No articulo palabra pero el paciente me lee el pensamiento. "Viene de rojo como si fuese un árbol de Navidad ya que aquí no tienen árbol pues le han puesto a usted". Sonrío, no lo había pensado y agradezco su ingenio.
Así que tras atender al último paciente, miro mi reflejo en la ventana. ¿ Árbol de Navidad?, ¿ es eso lo que soy?. No veo claramente mis ramas y necesitaría más adornos que unos simples pendientes. Sin embargo hay algo que me atrae de la idea, me atrae la luz que despierta, la belleza, la alegría y las personas que se reunen alrededor del árbol. Me atrae el compartir, la curiosidad y los buenos recuerdos. Y pienso que quizás todos seamos un poco árbol...Árboles que caminan y que con sus ramas tocan a otros....Árboles que ven lo invisible a través de lo cotidiano...Árboles que traen esperanza y muchas pizcas de bondad...Y quiero ser un poco árbol esta Navidad, quiero recordar que estamos aquí para llenar de Luz este lugar...

martes, diciembre 21, 2010

Diciembre.

La escritura forma parte de mi día a día. Firmo cientos de papeles inútiles pero a veces puedo usar las palabras para algo útil. Hace pocos días un niño vino a la consulta acompañado de su madre. Ella es sordomuda. Él es un parlanchín. Pronuncio lentamente las frases y con ayuda del papel nos entendemos. Identifico el problema y busco una solución. Él no está tan contento en este mundo de papel así que empieza a hablar. Cinco años dan mucho para hablar.

- Tú naciste en Diciembre.
- ¿ Qué?.
- Tú naciste en Diciembre.

Mirada atónita. Un metro treinta, ojos castaños y un disparo certero. Soy toda oídos.

- Sí, nací en Diciembre, ¿ cómo lo sabes?.
- Tienes cara de nacer en Diciembre. Las personas como tú nacen en Diciembre.
- ¿ Y cuándo nacen las personas como tú?.
- En Diciembre, claro.
- Me lo olía.
- Tú naciste el día uno.
- No.
- El dos.
- No.
- Sigue probando.

Su madre nos mira ajena a este espectáculo de palabras mientras su hijo acaba recitando todos los días del mes. Constato que sabe los números correctamente lo cual es de esperar a pesar de que el fracaso escolar se ceba en los niños que nacimos en ese mes.

- Veinte y uno.
- Correcto.
- ¿ Naciste el día veinte y uno?.
- Sí, ¿ Y tú?...Tu naciste el día tres.
- No.
- El cinco.
- Sí.
- ¿ Cómo lo sabes?
- Tienes cara de haber nacido el día cinco.
- Eso dice mi madre.
- Ella debe estar orgullosa de ti.
- A veces no.
- Bueno hay que portarse bien.
- Ya...
- Pues Feliz cumpleaños de la nacida el día veinte y uno al nacido el día cinco.
- Muchas gracias.
- ¿ Soplaras las velas?.
- Sí y ya hice la lista de regalos.
- Pues ya me contarás que tal va todo.
- Vale.

Sonrío a la madre y le digo que tiene un hijo encantador. Ella asiente pero entre gestos me dice que habla mucho y sonrío. Sí, habla mucho pero lo que dice tiene mucho sentido. Lamento que ella no haya podido seguir esta dulce conversación, lamento que ella no haya escuchado nuestras palabras pero quizás por eso su hijo es como es....



_Feliz Cumpleaños a los que tienen cara de haber nacido en Diciembre.

sábado, diciembre 18, 2010

I carry you.

Tengo dos conversaciones sobre el mismo tema con tres días de diferencia. Una conversación es femenina. Otra es masculina. Ambos tienen los ojos húmedos. Ambos sufren. Ambos ven una pared entre ellos. No se juzgan mutuamente, están demasiado cansados como para hacerlo. No son capaces de dejar las diferencias a un lado. Las diferencias son simplemente que la vida es cruel. Cruel. Y no saben cómo dar ese paso. Ese paso en el que ambos lloran y deciden no hacer más complicada la vida de lo que ya es. Y yo no sé cómo ayudarles. No lo sé, de lejos suenan las palabras de Marlango, quizás debieran escucharlas....


I carry you
You carry me
trough

Sometimes my storms will soak you
Sometimes your summer will dry me up
I just need to feel the shadow walking close to mine

I carry you
You carry me
trough

For good and night
For morning gloom
Sometimes we'll share the seasons
Sometimes we'll forget the reasons
But I carry you
Sometimes we'll share the reasons
Sometimes we'll forget the seasons
But I carry you
You carry me
trough

miércoles, diciembre 15, 2010

La triste realidad.

"Consultas de cinco minutos son más propias de la atención veterinaria que de la atención médica. Supone tratar a las personas como si fueran ganado."


J. Tudor Hart. Médico General.


_Esta frase circula últimamente en los corrillos médicos. Desgraciadamente los gestores sanitarios consideran ganado a los pacientes e insisten en que 5,4 minutos por pacientes es una atención de calidad....¿ Algún día trataremos a las personas como seres humanos dignos de atención?....

jueves, diciembre 09, 2010

Rosa chicle.

No ocurre a diario, sólo de vez en cuando, pero en ocasiones viene una paciente anciana con unas gafas de sol rosa chicle que por supuesto no se quita para no estropear el look. Otras veces es un jersey de purpurina plateada o los clásicos zapatos de charol que me apasionan. Ayer una mujer entrada en años,que había sufrido las inclemencias de la quimioterapia, traía un sombrero rojo intenso con un hermoso abrigo blanco....Y ese look no es un anhelo de una pasada juventud, no es un no saber envejecer sino un rabioso mensaje: "Sigo con vida".....Habitualmente cumplen con las pastillas a la perfección y saben de sobra que estamos de prestado así que voluntariosamente prueban todo remedio que prolongue la vida....A veces bromeo con ellas y les digo que como no vengan con la raya pintada, no entran en la consulta a lo que responden con una presumida sonrisa...Y al verlas, siempre pienso que hay personas demasiado especiales para un mundo tan corriente, pienso que quiero imitarlas aunque nunca sea tan valiente de dejar los tonos grises para moverme a los colores pastel....

domingo, diciembre 05, 2010

Caza.

- Doctora, me siento más nervioso desde que dejé la caza, no duermo bien por las noches, me siento pesado....
- ¿Pesado?.
- Sé que suena raro pero siento como que me falta algo.
- Uhmmm...




_ A veces creo que necesito un diván en la consulta pero no sé bien si para el paciente o para mí.

sábado, noviembre 06, 2010

Libros.

Está abierta. Mi vieja biblioteca está abierta. Está un poco renovada pero los libros siguen siendo los mismos. Tienen un poco más de espacio pero siguen ahí. Y siguen abriéndome camino. Siguen llamándome desde la estantería. Siguen diciéndome que no sé nada y que si no les meto en mi bolso no voy a aprender nada nuevo. Consiguen que tenga un ojo puesto en un artículo científico y el otro en sus líneas. Tengo que reconocer que lo han conseguido nuevamente. Han conseguido que empiece a leer con la asiduidad habitual. No sé exactamente cómo lo logran pero caigo rendida a sus pies. Rendida a las palabras de C, de P hasta una anónima escritora me ha dejado fascinada...... ¿Cómo he tardado tanto en leeros?, ¿ cómo he tardado tanto en llegar a la estantería con vuestras letras?..... ¿Por qué sigo pensando en vosotros?...No suelo descubrir buenos libros en las librerías, parece como si los colores y el olor a nuevo cegaran mi intuición pero en la biblioteca suelo descubrir a personas desconocidas que abren tal horizonte que me pregunto cómo era mi mundo antes, antes de ellos....Y por eso, me imagino que continuaréis flirteando conmigo porque hasta el bibliotecario es capaz de desearme un buen día con una sonrisa.....

jueves, noviembre 04, 2010

Silencio.

Ojos hundidos, húmedos, perdidos.

- Lo he perdido todo.....Todo....Y para colmo, nadie me cree. Ninguno de ustedes se dignan a darme una explicación. Un algo, una solución. No, ustedes,ustedes están sentados detrás de la mesa. Continúan empeñados en decirme que me lo estoy inventando. ¿ Cómo voy a inventarme algo semejante?, ¿ cómo pueden siquiera pensarlo?, ¿ quienes se creen que son?.... Me duelen hasta las cejas pero se pasan la pelota unos a otros. ¿ Consiste en eso ser médico?, ¿ consiste en ignorarnos?, ¿ en tratarnos como perros?....¿ Es eso?....

( Silencio).

Llevo tres años en este infierno y lo odio. Odio cada día, odio levantarme de la cama, odio no poder hacer la cama, odio esto. Lo odio tanto que apenas puedo respirar....... y si lo hago, si continuo respirando no es por mí, es por ellos.......

( Más silencio).

sábado, octubre 30, 2010

Viva.

....Una página en blanco, un poco de lluvia y el brezo en la ventana..... Debería decir otra cosa.... Debería contar otra historia... Otras historias.... Hoy no sé bien por donde empezar. Renoir, el Prado, la calle Argensola, el teatro de autor. Todas estas palabras resuenan sin saber a donde ir. Todas ellas han iluminado la semana. Ellas son reales como mi taza roja del Moma, reales como Rosie Thomas que va a Michigan y no a Marte, reales como el libro de muffins que descansa sobre la mesa. Y mis ojos deberían estar acostumbrados a descubrir las pequeñas cosas. No siempre lo hacen, no siempre lo permiten....a veces parece que el montón de información que llega a mis oídos, me impide acercarme a otras cosas....Así que hoy he hecho un ejercicio....un ejercicio de ver y oír sin reservas.....Hoy he comprado una calabaza naranja para hacer sopa, he hablado con un hombre mayor en la cola del supermercado y he usado mi gorro gris por primera vez....Me he mojado un poco, he escuchado una conversación acerca de los muertos y he mirado al pulpo que descansa en el congelador....Hoy he recordado que sigo viva y esa es la mejor historia que puedo contar....

jueves, octubre 07, 2010

Calma.




_Vuelve la calma.

viernes, septiembre 03, 2010

15.

- ¿ Su padre fuma?.
- ¿ Perdón?.
- ¿ Que si su padre fuma?.
- Ehh, no.
- ¿ Y usted fuma?.
- Uhm, no.
- Es que he traído unos puros para el médico y como no está pues se lo daba a usted.
- Ahh pues gracias pero no fumo. Mejor se los trae en la próxima visita que seguro que le harán mucho ilusión. Gracias.
- De acuerdo.

miércoles, septiembre 01, 2010

Humanidad

Hay que reconocer que somos humanos. Y como humanos, sentimos, padecemos y nos cabreamos como el resto del planeta. No hay diferencia. Así que cuando alguien me suelta una de esas perlas que uno no pidió escuchar jamás, entonces te cabreas. Te cabreas por dentro mientras miras al usuario con cara de esto no debería estar sucediendo. Humanidad en sentido puro.

- ¿ No está mi médico?.
( Curioso porque su médico es varón, edad media, barba y diferente estatura).
- No, no está hoy.
- ¿ Está de vacaciones?.
- Sí, está disfrutando de unos días de descanso
( Sonrisa cordial por mi parte. Inocente corderita).
- Pues los médicos no deberían tener vacaciones.
( Uhmm...eso es empatizar con el médico y lo demás son patrañas...)
- ¿ En qué puedo ayudarle?.
- Hay profesiones públicas como los policías, los maestros y los médicos que no deberían tener vacaciones. El médico no se puede ir de vacaciones. Deberían pagarles más pero tienen que estar siempre aquí, son necesarios.
- Uhm...Esto...
( ¿ Donde está la cámara oculta?, ¿Usted no trabajaba en los sindicatos, verdad?)
- Uno quiere hablar con su médico que para eso es su médico...
( Peligro! Peligro! Hay que terminar la conversación cuánto antes, ya le veo diciendo que quiere que le vea un médico y no "la chica esta").
- Si quiere hablar con su médico me parece bien pero tendrá que esperar, yo desconozco cuando vuelve de vacaciones...Las vacaciones es un derecho que reconocen las leyes en la Unión Europea así que si yo le puedo ayudar, me encantaría hacerlo sino pida cita a final de mes.
- ¿ Final de mes? Qué país, un mes sin médico, así vamos.
( Uhmm...Cuando alguien dice que un mes sin médico me pregunto si piensan que yo soy Miliki....)
- Si no quiere nada, hasta otro día que hay más pacientes a la puerta esperando.
( Menos mal que hay más pacientes y no tienen a bien compartir sus ideas de que el médico no tiene derecho a vacaciones).
- Bueno si va a tardar un mes pues tengo algo de tos.....
- Pase por allí que voy a examinarle.

domingo, agosto 29, 2010

Hipócrates.

A veces las frases más inesperadas llegan en los momentos más triviales. No sabes cómo o porqué alguien decide poner conciencia a tu trabajo diario. Lo hace con serenidad mientras juega con un llavero entre las manos. No debería estar sentado en ese lugar. No debería ser un paciente. La vida no debería ser de algunas formas pero lo es. Y él lo sabe, yo lo sé pero hay poco que podamos hacer. Poco. Y ambos somos conscientes. Y entonces él empieza a hablar, habla mirando a sus manos como un mero transmisor.Un transmisor de todos aquellos que se sientan o se han sentado en su lugar.

- No debe ser fácil estar en su lugar. Todos los días dando malas noticias porque lo que me ha dicho a mí no es precisamente bueno. No es su culpa pero no es bueno. No debe ser fácil escoger el Juramento Hipocrático y mantenerse humano entre tanta oscuridad.Escoger hacer el bien por encima de todo, ¿era eso lo que decía Hipócrates,no?.

Le miro atónita y asiento. No puedo abrir la boca. No tengo palabras.

miércoles, agosto 18, 2010

14.

- Me voy a ir una semana con mi hija al pueblo y necesitaba las recetas.
- Qué bien, pues hacemos una receta de cada para que no se quede sin medicinas.
- Gracias, voy a estar con los nietos.
- ¿Y cuántos nietos tiene?.
- Tres hijos y siete nietos.
- Qué maravilla.
- Sí, me quieren todos mucho.
- Y usted también les querrá a ellos.
- Claro, daría mi vida por cada uno de la familia.
- Qué bien.
- También daría mi vida por usted.
- Uhmm pues muchas gracias, es la primera vez que me dicen eso.
- Sí, usted es muy simpática.
- Muchas gracias, es muy amable.
- Si fuesemos más generosos, todo iría mejor.
- Tiene razón.
- A mí que no me quiten la familia ni la iglesia, el resto no tiene valor.



_sin palabras.

jueves, agosto 12, 2010

La piscina.

Paciente, 63 años.

- Necesito un papel que ponga que tengo que llevar la silla a la piscina.
- ¿Disculpe?.
- Sí, es que el chico de la piscina dice que si no hay papel del médico no hay silla.
- ¿Y eso?.
- Pues resulta que a mí me duele la espalda y vi que las abuelitas que van a la piscina llevan silla y el resto no...Así que pregunté el porqué y me dijeron que las abuelas habían llevado un papel del médico y claro yo también quiero llevar mi silla.
- ¿ Y por qué no le dejan llevar la silla?.
- Porque estropea el cesped.
- Bueno pues haremos una notita afectuosa:

"El paciente solicita informe médico para llevar silla a la piscina. Por mi parte, considero que el paciente, su mujer, sus hijos y sus nietos estarían más cómodos si llevaran una silla a la piscina. Considero apropiado que el paciente y cualquiera de los 1500 pacientes del cupo lleven una silla a la piscina si lo creen oportuno por lo que ruego se abstenga de pedir informe médico a cualquier paciente que esté bajo mi cuidado. Un saludo, muchas gracias".

Leo la nota a mi paciente para preguntar si está conforme con mi respuesta.

- Gracias doctora, son unos caraduras.
- Yo no tengo nada que añadir solo que se eche protección solar.
- Gracias.

lunes, agosto 09, 2010



_por las ciudades hermosas, por las bicicletas, por los libros, por el cine, por las caperuchas.

domingo, agosto 08, 2010





_ por los días felices, por los neoyorkinos, por ver el mundo pasar.

jueves, julio 29, 2010

13.

- Vengo a por los santos.
- ¿ Los santos?.
- Si los santos.
- Disculpe pero santos aquí no tenemos...
- Que sí, mujer, los santos esos para la tensión.
- Ah,¿ necesita usted las pastillas de la tensión?.
- Sí.
- ¿El losartán*?.
- Sí, los santos.



*El losartán es el antihipertensivo que mi paciente ha bautizado como los santos.

miércoles, julio 28, 2010

Roto.

Quince años y le han roto el corazón. Son cosas que pasan. Pasan pero no consuela el saber que pasan. Tiene quince años y con el corazón medio roto me pregunta si no hay pastillas que curen eso. ¿ El corazón roto?. Pues de momento no. Ojalá las hubiera pero aún no las hemos inventado.
Tierna inocencia.

sábado, julio 24, 2010

16.57

Está tan nervioso que apenas puede hablar, no levanta la vista, solo mira a los cartoncitos donde están los nombres de las medicinas que precisa. Tiene tantas arrugas que cuesta conocer su edad. Y habla con lentitud, con la sensación de que lo que le está sucediendo no es normal. Él sólo dice que no quería venir al médico. No quería venir porque su mujer ha ido al hospital. Ella está en el hospital. Y lo dice con tal decadencia que cuesta comprenderle. Está preocupado. Sólo puede repetir que es su mujer. Su mujer. No logro que me diga lo que le sucede a ella. Sólo responde que es su mujer mientras los ojos se vuelven un poco más vidriosos. Así que hago las recetas y deseo que su mujer se ponga buena pronto. Él asiente mientras sale cabizbajo de la consulta como si el peso del mundo estuviese sobre sus hombros, porque el peso de su mundo está sobre él en este instante.

martes, julio 20, 2010

12.

Cinco años. 29 años.

- ¿ Por qué hay una cama aquí?.
- Para hacer cosquillas.
- ¿ Cosquillas?.
- Las personas vienen al médico para que le hagan cosquillas.
- ¿ Seguro?.
- Segurísimo. Sólo que es un secreto.
- ¿Un secreto?.
- Sí, no se lo puedes contar a nadie porque sino todos querrían ser médicos.
- Vale.
- ¿ Me guardarás el secreto?.
- Sí.
- Gracias.

miércoles, julio 14, 2010

Aquellos.

Siempre me han sorprendido todos esos familiares cuidadores que se dan a los demás sin ningún tipo de limitación. Aquellos que se entregan porque haciéndolo son lo que desean ser. Aquellos que no tienen un salario asignado. Aquellos que están de guardia todo el día, todos los días del año. Aquellos que se dan sin pedir nada a cambio. Aquellos que no se imaginan que la vida pudiese ser de otra manera. Aquellos que lo hacen y que logran que el mundo sea mejor. Mucho mejor aunque se pierdan en el anonimato.
Desde el otro lado de la mesa, mi completa y sincera admiración.

sábado, julio 03, 2010

Embarazada.

Ayer cuatro pacientes me preguntaron si estaba embarazada. Cuatro personas. Era la primera vez que me veían. La primera pregunta vino de una embarazada de casi 9 meses. Me lo dijo sonriendo. Y respondí simplemente que no. No estoy embarazada. Ay parecía. Es un vestidito ancho. La segunda vez vino de una mujer de mediana edad. Me lo preguntó con la ilusión de quien sabe que lleva la razón. Ay pues no. Es que no suelo fallar. Ya, bueno. La insolencia me toca de lleno. Pensaba que ya había sido suficiente pero me equivoqué, para variar, me equivoqué. Dos mujeres más me preguntaron si estaba embarazada y una de ellas me tocó el vestido. Me tocó el vestido y me tiró un poco del mismo. Me tiró del vestido.
Y como no soy suficientemente asertiva para decirlo a mis pacientes, lo diré aquí. Me parece mal que un desconocido me pregunte si estoy embarazada. Me parece mal que uno vaya al médico y le pregunte si está embarazada. Me parece fatal, me parece sexista, cotilla y de mala educación. Me parece mal que un desconocido me toque el vestido a propósito. Me parece fatal que me tire del vestido. Me parece mal, muy mal y cada vez que lo hacen quiero gritar. Quiero gritar porque a ninguno de mis compañeros varones le tocan la tripita, porque no les tiran de la camisa y se quedan como si fuese lo más normal del mundo. Quiero gritar porque no me identifico con esa parte de mi género que se cree con el derecho de preguntar todo lo que se le pasa por la cabeza. Quiero gritar pero no puedo.

jueves, julio 01, 2010

Suplente, día 1.

- Bueno os presento a Sara.
- Hola, soy Sara, soy la suplente de este verano.
- Pues esperábamos a la Carbonero.
- Uhmmm...ya, yo también preferiría intercambiar papeles....Lo siento...Es una decepción pero no soy la Carbonero.
- Bueno, nos apañaremos.
- Ya, a mí tampoco me importaría estar en Sudáfrica pero....
- Bienvenida.
- Gracias.

viernes, junio 25, 2010

11




- Entonces las pastillas me las tomo tres días.
- Sí tres días y ya está.
- Gracias.
- Hasta luego, que tenga un buen día.
- Bueno tendré un buen día si España gana.
- Hombre no hay que ser tan drásticos...
- No, no...mi día acaba bien si ganamos sino mal...
- Está bien que ganemos pero hay más cosas que el fútbol...
- Sí, hay más cosas pero el mundial sólo es cada cuatro años así que tienen que ganar.
- Pues, mucha suerte entonces.
- Sí, necesitamos suerte.
- Hasta luego.
- Adiós.

miércoles, junio 16, 2010

La librería M.

"O derradeiro libro mercado na librería M, o fin dunha época."

Así empieza el último libro que tengo ya en la estantería. La noticia rompió mi tranquila y pacífica visita a Galicia. M cierra sus puertas tras 30 años en la ciudad. El corazón se me rompió un poco al ver los estantes vacíos pero me negué a creerlo hasta hablar con alguno de los que allí trabajan quien confirmó la noticia. Y mi corazón se rompió un poco más aunque como bien afirmaba mi madre con mis compras no podrían mantenerse. Mi amor por M fue un amor puberal. Antes no iba a M, antes íbamos a la librería S que quedaba en la calle O. La librería S era otra cosa. Un hombre muy mayor dirigía la librería con mucha mano izquierda. Era el dueño. Sabía desde donde estaban las grapas hasta el libro más recóndito. No había nada que escapase a su memoria. Allí hacíamos cola cada principio de curso para comprar los libros y allí el mismo hombre nos hacía la cuenta rebajando siempre algunas pesetas. Nunca llegamos a saber la razón de la rebaja pero siempre hacía rebaja. Recuerdo cómo apuntaba los precios y cómo hacía la cuenta en un abrir y cerrar de ojos. Siempre admiré esa rapidez en la que no le escapaba ni una peseta. Así sucedió parte de mi infancia con alguna que otra visita a la biblioteca. Al cerrar la librería S nuestra fidelidad a la misma desapareció y allí comenzó mi relación la librería M.

M era otra cosa. Había cientos y cientos de libros ordenados alfabéticamente pero mi interés empezó porque los libros de Siruela estaban situados a la entrada dentro de la sección infantil. Los libros de Siruela siempre han sido un gran interrogante. Son historias sencillas y dulces, algunas veces con algo de traición pero siempre cálidas. Así empecé mis visitas y con el paso del tiempo fuí apreciando otras cosas. Los dependientes no eran meros dependientes. Los dependientes se lo sabían todo, los autores, los libros, las fechas y siempre dejaban caer algún comentario que por norma resultaba profético del libro en cuestión. Allí aprendí que hay diferencias entre hacer un trabajo y amar un trabajo. Aquellos hombres con canas amaban los libros y no tenían problema en empezar una tertulia a la mínima oportunidad. Habitualmente hablaban de política en la mitad de la librería. Hablaban con tanta retranca que muchas veces permanecí más tiempo sólo para escuchar cómo conseguían desarrollar sus argumentos sin caer en la mediocridad. No he sido una asidua de la misma porque siempre salía con un libro bajo el brazo. En muy pocas ocasiones he salido de allí sin comprar algo. Los libros con su pequeña etiqueta en letras antiguas me parecía no solo entrañable sino una muestra de compromiso. El compromiso de crear un espacio donde las palabras tenían vida propia. Y ahora que ese espacio se cierra, no sé bien que decir. No tengo una librería M en Madrid, la he buscado pero sigo sin encontrarla. Siempre tenía la esperanza de comprar libros allí y ahora me siento un poco huérfana...Cuando compré mi último libro, una hermosa historia de un viaje en el tiempo, sólo pude agradecerles su servicio a la ciudad y su amor a los libros....A lo que el dependiente asintió con una triste sonrisa.....Ojalá vuelvan pronto....Ojalá vuelvan porque ya les echo de menos....

miércoles, mayo 26, 2010

Gracias.

Hoy es el primer día del resto de mi vida. Hoy es el día para el cual he invertido once años de vida. Hoy es el día en el que soy médico de familia. Ni más, ni menos. Médico. Hoy es un día para recordar. Hoy es un día para mirar atrás y agradecer. Agradecer a todos los que me habéis ayudado a llegar hasta aquí. A todos los que me habéis animado y habéis visto este día con la fe de que algún día llegaría: ha llegado y solo puedo deciros gracias. Mil gracias por todo.
Gracias a todos los que leéis esta terapia llamada blog. Gracias a todos los que dejáis un comentarios de pascuas en viernes o leéis de forma anónima. Gracias por estar ahí.

Eternas gracias a todos.

viernes, mayo 21, 2010

10.

- Tó lo que uzté me manda me zienta fatal.
- Pues no era esa la idea.
- No acierta con ná.
- Bueno...a ver si hoy acertamos...
- A vé yo vengo porque eztuve hablando con mi hermana por lo de la cabeza y ella toma eztas pastillas. Yo también quiero probar porque a ella le van mú bien.

(La paciente trae un analgésico que ya ha probado pero su hermana toma el genérico mientras que ella solo ha tomado el medicamento con nombre comercial. Previamente le había ayudado así que decido probar a darle el mismo medicamento pero con otro nombre. El poder de la mente es desconocido. Es la séptima visita en lo que va de mes por motivos vagos y vanales. Necesito el poder de su mente).

- Lola, me parece bien. Vamos a probar porque si le ayuda pues por qué no.
- Digo yo, zi no ez malo probálo porque mi hermana dize que zon mú buenas.


Dos días más tarde, mi paciente viene de punta en blanco, maquillada, bien peinada y con un vestido de lunares.

- Vengo de urgenzias porque ezas pastillas que me mandó uzté me sentaron mú mal.
( Resulta curioso que cuando las pastillas le sientan mal, la culpa es mía y no de su hermana).
- ¿ Qué le ocurrió?.
- Mucho azco, unos azcos...Mú mal...Azí que llamé a mi hermana para saber zi a ella le daban azcos y también pero ezo no me lo contó cuando hablamos la primera ves.....Zolo que a ella los azcos no zon tan fuertes como a mí...Creí que me moría....yo no lo vuelvo a tomar...
( Ay la hermana, menuda hermana).
- Bueno pues no acertamos, Lola, yo creo que de momento vamos a esperar un poco antes de darle más pastillas que le provoquen naúseas, mareos o cosas de esas....La idea es ayudar, si no ayudamos mejor dejarla como está....
- Pero no me va a dar máz pastillas...yo azí no puedo estar, doctora, que me muero....
- Lola,que no se puede morir con lo guapa que viene hoy; por lo menos pasear por el boulevard así que hoy no toca otra cosa que andar y disfrutar del buen tiempo...Vamos a descansar un poco de pastillas, ver cómo va y ya le daremos algo si vemos que la cosa empeora mucho.
- Ayyy, doctora...
- Ayyy, Lola....
- Adioz que lo paze uzté bien.
- Y usted también.

jueves, mayo 20, 2010

Manía.

Me imagino que uno no es médico hasta que alguien decide ponerle como objeto de todos sus males. Hoy un paciente me dijo que le tenía manía. Yo aclararía que tener manía equivale a no hacer lo que el paciente espera/quiere o paga como argumentaría mi paciente. Yo pago para que usted haga esto.Uhmm, a mí me pagan para hacer lo mejor para su salud pero no para cumplir sus deseos. No soy Ali ba ba aunque lo parezca. Así que cuando mi paciente dijo que le tenía manía, no pude por menos que sonreír. Ahora formaré parte del grupo de médicos que los pacientes ponen verdes en la cola del supermercado. Esto es graduarse y lo demás son gaitas.

miércoles, mayo 19, 2010

El abrazo, segunda parte.

El primero fue un abrazo inocente. El segundo fue un abrazo que había perdido la inocencia.Un abrazo que ojalá no hubiese sucedido.
Me imagino que fueron las gafas negras las que trajeron malos agüeros. No tenía cita. Siempre la misma frase, ¿ puedo hablar con usted?.En un hueco, pasa esta mujer que temblorosa se retira las gafas para ver sus ojos hinchados. Y una única frase antes de romperse otra vez. No hay nada que hacer. Nada que hacer. Si pudiese eliminar una frase del diccionario, eliminaría esta. La frustación, el sufrimiento, la impotencia que hay detrás de estas tres míseras palabras me quita el aliento. Y ella empieza a llorar. Llora con tanta fuerza que agarro su mano con firmeza. Trago saliva para mantener la mirada y nuevamente busco en mi corazón algo de esperanza. Esperanza cuando no la hay. Esperanza cuando todo sale al revés. Esperanza cuando ya hemos tirado la toalla. Y hago ese viaje. Ese maldito viaje en el que regreso a una cama de hospital. Ese viaje en el que ella es la paciente y yo estoy sentada en una silla de una habitación aséptica. Ese maldito viaje. Ese viaje. Ese viaje en el que mi familia perdió la inocencia. Ese viaje que termina donde no quieres. Y sé lo que es estar ahí, lo sé. Y mi corazón se rompe por esta mujer. Ella aún está temiendo lo que se avecina. Aún ve el miedo sin saber lo cruel que puede llegar a ser.Y rescato todas las palabras que aprendí en aquel viaje. Las rescato con ternura porque han cambiado mi vida. Aquel viaje cambió mi vida. Hay que vivir día a día, no vamos a correr, vamos a vivir día a día. No es el mañana, es el hoy. No crea las palabras vacías, no crea los pronósticos a pies juntillas. La última palabra no está en nuestras manos, no es nuestra. Cuánto más oscuro sea el camino, más Luz hallará, más Gracia, más Amor, más Paz....Y entonces ella agarra mis brazos para abrazarme así que me levanto y abrazo a esta mujer que llora en mis brazos. Y oro, oro para que encuentre las manos que vendaron mi corazón.

martes, mayo 18, 2010

El abrazo.

Es el paciente número 39 del día. Empiezo a estar cansada. La cabeza empieza a pesarme un poco. Sólo escucho quejas y malamente logro robar una sonrisa a los pacientes. Todos parece muy ensimismados con lo que hacen. Y repito el nombre por el altavoz, estoy segura que lo he pronunciado mal, demasiadas consonantes en una única palabra. Entonces abre él la puerta, ha venido un par de veces así que no le conozco demasiado bien. Hoy viene acompañado de su hijo. Su hijo de cuatro años con el pelo rizo y ojos profundos.
Es la primera vez que viene con él, es la primera vez que veo a esta criatura. Es entonces cuando el niño camina hacia a mí y me abraza. No he dicho más que un hola pero aún así me abraza, rompe un poco mi coraza y le abrazo con una sonrisa. Me mira con una cara tan seria que hace daño y digo cosas vanas, cosas que no sienten o abrazan. Y lo digo mientras hablo con su padre con mil interrogantes paseando por mi cabeza. Y mientras él, el pequeño protagonista, permanece sentado sin moverse un ápice mientras me mira....y me pregunto cual será su historia, cuál será la historia de este padre y este hijo. Y no lo sé, probablemente nunca lo sepa.

jueves, mayo 13, 2010

No sé por qué.

No sé si es porque he hecho mi última guardia de la residencia o porque estoy al borde de caer rendida de cansancio. No sé por qué pero tengo ganas de soñar. Tengo ganas de viajar en tren, de sonreír y pensar en cómo podrían ser las cosas. Ganas de dejar la imaginación volar hasta que el reloj me recuerde que es hora ya de despertar. No sé si tener un laurel en mi balcón ha modificado mi buena voluntad o si ha sido Marina Abramović con su peculiar forma de ver el arte...pero quiero volver a ser....quiero volver a escribir, quiero volver a escuchar a Marlango, quiero volver a pasear, quiero fijarme en los árboles que me saludan por la ventana, quiero hablar por teléfono sin hacer otra cosa a la vez, quiero sostener mi taza roja y pensar más en el Moma....quiero que pronto haya amapolas y quiero, quiero vivir, vivir con menos prisa.....

jueves, mayo 06, 2010

9.

- A ver tengo juanetes.
- Sí...
- Y cuando me pongo algunos zapatos se me ponen rojos.
- ¿ Con qué zapatos?.
- Pues con los zapatos de tacón o las manoletitas...
- ¿ Y eso le sucede con zapatos más anchos?.
- No, con otros zapatos no me molestan.
- ¿ Y cuál cree que es la solución?.
- Es que a mí los zapatos que me gustan me hacen daño y claro si me opero los juanetes podría ponerme esos zapatos.
- Viendo sus pies no tiene indicación de cirugía.
- Pues mi vecina la del cuarto se operó y ahora lleva tacones.
- Ya pero el pie es la base de nuestra estabilidad, yo no le aconsejo operarse por poderse poner unas manoletitas. Creo que el riesgo no compensa con el posible beneficio estético.
- Ay, es que a mí no me gustan los zapatos anchos...son horrorosos....

miércoles, mayo 05, 2010

8.

- Rocío, puede que hoy sea la última vez que nos veamos. Quiero que sepa que ha sido un placer atenderla, le deseo lo mejor.
- ¿ Nos deja?.
- Sí, mi contrato se termina así que probablemente no vuelva a atenderle.
- Ay, pues si hay que recoger firmas para que no se vaya, yo firmo.
- Muchas gracias, Rocío. Espero que no sea necesario pero muchas gracias.

viernes, abril 30, 2010

7.

- Paciente 1: Ay, doctora pues lo estoy pasando mal con la rodilla...no aguanto jugando al padel como antes, me dan unos tirones mortales....
- Amiga de la paciente 1:Oye, es igualita a mi cuñada la de Murcia...Igualita...
- Doctora: Bueno vamos a ver su rodilla.
- Amiga de la paciente 1: Hasta la misma voz...Clavadita...qué graciosa...
- Paciente 1: Sí, es muy salada...

La doctora explora la rodilla.

- Paciente 1: Ay, ay, es ahí....
- Doctora: Parece que tiene una tendinitis, señora.
- Paciente 1: Ay no me llame señora que me hace muy mayor...
- Amiga de la paciente 1: Hija, que nosotras somos como unas quinceañeras sólo que con algunos retoques.
- Doctora: Bueno, vamos a tomar un antinflamatorio y veremos cómo va la cosa. Si en una semana no ha notado mejoría, debe volver para ver si precisa algo más de tratamiento.
- Amiga de la paciente 1: Ay, eso a mí no me pasa...Mi médico no me quiere ver ni en pintura...Y no veas lo que uno espera...Buf....
La doctora se muerde la lengua.
- Paciente 1: No, aquí eso no pasa.
( Pasan otras cosas,querida señora...otras cosas...)
- Doctora: Pues lo dicho, aquí tiene la receta.
- Paciente 1: Muchas gracias, a ver si va mejor la rodilla.
- Doctora: Eso espero.
- Amiga de la paciente 1: Pues un placer conocerla, ya se lo diré a mi cuñada la de Murcia...Ay que parecen gemelas.....

jueves, abril 29, 2010

6.

- Sí, debe tomarse el tratamiento.
- Una pastilla por la mañana y otra por la noche.
- Efectivamente.
- Pues, acuerdese de su madre.
- ¿ Qué va a traer a su madre a la consulta?.
- No, que le compre algo a su madre.
- ¿ Perdón?.
- Que le regale algo a su madre porque seguro que usted no es madre...Es tan joven...
- Ah, gracias; lo tendré en cuenta. Muchas gracias, buen día.
- Buen día.
- Cuídese, hasta luego.
- Hasta otro día.

miércoles, abril 28, 2010

No lo sé.

- Dígame que esto no está pasando.
- Me temo que no puedo pronunciar esas palabras.
- ¿ Cómo ha sucedido?. He tomado mi medicación, he asistido a las citas médicas, las radiografías, los escaners, todo....Lo he hecho todo....Y ahora esto....¿ Cómo?...
- Bueno hay un tanto por cierto muy bajo de pacientes a los que le sucede esto.
- ¿ Y yo soy ese número?, ¿ soy yo?.
- Desgraciadamente parece que sí....Está en ese número invisible de complicaciones que nadie ve salvo los protagonistas....
- Pues no lo entiendo, no entiendo nada, no me fío de nada y de nadie....Todo mi esfuerzo, ¿ para qué?, ¿ para acabar otra vez igual?....Ya he pasado por eso, es un infierno....un maldito infierno...Y no puedo hacer nada, no puedo reclamar, no puedo cambiar lo que me dice....¿ Y esto me va a volver a pasar?, ¿ voy a tener que pasar por este calvario más veces?, ¿ cuántas veces?...
- No lo sé...

Y rompe a llorar, este hombre de mediana edad rompe a llorar en silencio. Y respiro hondo, muy hondo.

- No le puedo dar respuestas porque no las tengo, no las hay....
- Lo sé, no tengo nada contra usted, no es su culpa...es solo...
- La impotencia, la frustración....Somos humanos, es normal que se sienta así....

Y las lágrimas comienzan a caer encima de la mesa.

- No lo entiendo, sólo, no lo entiendo. Quiero entenderlo pero no puedo....no puedo....
- Ya...sólo quiero que sepa que estamos aquí, estamos aquí aunque no tengamos respuestas....
- Lo sé....

lunes, abril 26, 2010

Espero que sí.

Hoy no voy a hablar de Nueva York, no voy a hablar del Village, no voy a hablar de Anna Lamott, no voy a decir que Vonnegut flirtea conmigo desde la estantería, no voy a decir nada de lo que se esconde en mi cabeza. Hoy ha sido un día de promesas cumplidas. Ninguna me atañía a mí en primera persona pero hoy he visto el resultado del esfuerzo, del sufrimiento, de los dolores de cabeza y las palpitaciones al pasear por un parque. Hoy he visto a un hombre llorar de alegría. Hoy he visto a una familia emocionada porque su hijo volverá a su hogar, volverá. Hoy he escuchado a una hija contarme la buena evolución de su padre. Hoy he visto cómo los largos meses del invierno han traído un poco de luz. Y ha terminado con un par de besos, una amplia sonrisa y un enhorabuena sincero....Hoy ha sido uno de esos días donde uno se emociona....Se emociona por ver que la felicidad también toca a veces a la ventana de la personas que acuden a la consulta....Y casi al final del día, una mujer me pregunta con la mirada cabizbaja...¿ saldrá bien?...¿Saldrá bien?...Y quiero que sepa que hay historias que pueden salir bien, quiero que sepa que yo voy a mantener la fe en que las cosas saldrán bien y aún cuando no salgan bien voy a mantener la esperanza viva...la esperanza en que todo ayuda para bien...¿Y saldrá bien?....Espero que sí,yo prefiero pensar que las cosas pueden salir bien....Así que espero que sí...

jueves, abril 08, 2010

Las flores azules.

_dedicado a mi familia en la ciudad condal.



Esta semana he hecho mi último triplete en la residencia. Triplete. Residencia. Palabras que tienen fecha de caducidad. Palabras que tuvieron un principio y que pronto tendrán un final. Y agotada llego a mi casa, las ojeras han hecho mella en mi cara y el futuro es incierto. Tres guardias en 6 días no es bueno. Te deshumaniza. Algo de ti se pierde y algo de ellos deja ya de ser. El cansancio hace esto sin avisar. Y en medio de todo esto, hay una llamada, una pequeña llamada.
Una voz dulce, un concierto y un poco de bondad. Así que no prometo nada, no puedo decir mucho, la chica del otro lado del espejo no se parece a mí. Y tras una ducha, acabo debajo de mi nórdico durmiendo las tres horas de rigor para volver a renacer. Necesito un té en mi taza de china. Y mientras me desperezo, empiezo a recordar la bondad, el concierto, mi familia....
Así que decido dejar el trabajo a un lado y parecer una persona normal aunque solo sea por unas horas. Es algo así como disfrazarse. Disfrazarse de mí misma. Y logro parecerme a mí así que cojo mis bailarinas y salgo camino del metro. Me bajo a medio camino y espero en el andén un poco de compañía para ir al concierto. Camino brevemente por las calles del centro para poner voz de buena y preguntar por unas entradas a nombre de Sara. Es entonces cuando me preguntan quien me invitó.... Quise decir que una voz dulce o una venerable anciana con piel de porcelana o un sexagenario que deja sus marcas en el cemento... pero quien me invitó fue un músico que logra acercarse a sus sueños...Alguien que por obra del destino comparte apellido conmigo...Y amablemente al decir el nombre, no la historia de la anciana con piel de porcelana o la de la mujer de voz dulce...Me dejan pasar...Y encuentro un lugar donde escuchar la música...Y me sobrecoge un poco todas esas personas que están allí escuchando la música, cantando con fuerza y bailando tranquilamente sin hacer ruido...Saben las palabras que yo no sé y siguen el concierto con la energía que yo no tengo...Y mientras el confetti vuela por los aires...Amarillo, rosa, verde, azul....Primavera, el verano del 84.....Y no sé cómo acabamos cantando Feliz cumpleaños a Ferran....y le veo, le veo haciendo lo que siempre ha querido hacer y sonrío, sonrío por él, por los suyos, por la fe en lo que uno hace, por los caminos llenos de flores azules....

viernes, abril 02, 2010

Una palabra.

Llevo meses repitiéndole lo mismo. No lo hago con cada paciente. No se lo digo ni siquiera a una cuarta parte de las personas que atraviesan las puertas de la consulta. No lo hago. Sólo repito esas palabras a aquellos que ya no se reconocen del otro lado del espejo. Ella no sabe ya quien es. Sabía quien era pero ya no lo sabe. Algo empezó a fallar. Y continuó fallando hasta que acabó en una de esas listas donde la gente espera a que otros se mueran. Y entonces lo digo....Mire, sé que no es fácil, sé que le estamos pidiendo mucho pero su vida es muy importante, aún podemos ayudarle mucho, aún podemos hacerle vivir más pero necesitamos que nos ayude...Tiene que seguir luchando, estamos con usted pero no se canse, no se nos canse porque todos queremos que esté bien....Y repito lo mismo durante meses, meses y nada parece cambiar....Mi mirada clara a los ojos no parece llegar a ninguna parte...El problema es la impaciencia ( la mía) por querer ver las cosas ya sin entender que la vida es como la mermelada de limón que hay que removerla con lentitud hasta que coja la textura adecuada....Así que el otro día sin previo aviso, ella me abrazó...Me abrazó con lágrimas en los ojos y sólo dijo una palabra...Gracias....y sonreí, sonreí abiertamente porque su gesto llenó mi corazón de esperanza...Gracias a usted, gracias por seguir luchando...

jueves, abril 01, 2010

Paréntesis*

Muchas veces tengo la sensación que mis palabras no van a ningún lugar. Repito lo mismo muchas veces y mis pacientes no prestan atención. No tienen porque prestarme atención. A veces me invade la soberbia de creer que la gente debe seguir mis consejos. Eso es falso. Es una mentira más que me invade para no asumir la realidad. Es más fácil vivir como hasta ahora que cambiar. Es más fácil seguir en la rutina que hacer algo que pueda costar algún esfuerzo. Frases acerca del tabaco, los kilos de más o las relaciones sin protección no llegan lejos. No llegan lejos porque somos humanos. Nuestra voluntad y nuestros deseos parecen condenados a convivir aunque no siempre estén de acuerdo...pero nos inventamos estrategias para convencer al prójimo de la necesidad de abandonar el tabaco (por poner algún nombre) sin hablar acerca de lo que hay en nuestro corazón....acerca de lo que no es hermoso, acerca de lo que nos duele, acerca de los que nos ata....y desde ahí, sólo desde ahí, quizás podamos ver que las cosas no tienen porqué ser así....no tienen porque ser como siempre han sido....y podemos sentir un susurro, un susurro de esperanza y de vida....un susurro dulce y tierno que nos recuerda que solo siendo débiles, podemos ser fuertes...sólo siendo barro, podemos ser moldeados....porque la historia no acabó un viernes, porque hay un domingo luminoso esperando a la vuelta....porque la Vida sigue hablando....

martes, marzo 30, 2010

5.

- ¿ Qué le sucede?.
- Vengo porque me duele la cabeza y tuve un estornudo.
- Pero, ¿ ahora le duele la cabeza?.
- No pero tuve un estornudo.
- ¿ Suele estornudar a diario?.
- No.
- Uhmmm.....así que ya no le duele la cabeza y ya no estornuda.
- Sí.



_ Estuve a punto de estornudar al escucharle pero me contuve por si luego me dolía la cabeza.....

lunes, marzo 29, 2010

El café.

La historia de un café.... es la historia de un montón de datos, de guardias sin librar y de querer ser parte de una pantalla de ordenador...La historia de un café es la historia de un secuestro en toda regla...Un secuestro en el que acabo comiendo una buena comida y callejeando por Malasaña cuando todo está cerrado....La historia de un café es blanca y roja porque esos son los colores que acompañan al lugar....Es la historia de un cuadro de Mandela con letras doradas que no inspiran libertad....Es la historia de un café de baja calidad combinado con una conversación de buena calidad...Es la historia de querer ser mejor....La historia de lo que podemos ser y no somos...La historia de un hombre que habla solo en voz alta porque se puede hablar en alto pero con voz bajita de modo que nadie se entere...La historia de alguien que tiene miedo mientras da vueltas con la cucharilla a un eterno café....La historia de una mente, de ese vecino desconocido con el que convivimos de hombros para arriba....La historia de una mesa vacía con un hombre sufriendo y la otra historia....La historia sobre mi silencio, sobre las cosas que no entiendo, sobre las cosas que no sé que hacer con ellas....La historia de esas cosas sobre las que nadie habla y un deseo, un pequeño deseo...que algún día llegue a saber qué hacer con esa caja donde guardo lo que no tiene explicación....

domingo, marzo 28, 2010

Café.




Detrás de este café, hay una historia.

sábado, febrero 27, 2010

House.

Varón, edad media, primera consulta.

- Me duele la rodilla.
- ¿ Cuándo?.
- Habitualmente si estoy mucho tiempo de pie.

Exploro la rodilla.

- La exploración es normal. Eso significa que le puede ocasionar dolor cuando la fuerze un poco pero no hay grandes cosas que hacer además de darle algún analgésico.
- Así que no voy a mejorar.
- Probablemente vaya por temporadas.
- También me sientan mal las comidas fuertes.
- Cada persona tolera mejor o peor ciertas comidas....Contra eso, no hay mucho que podamos hacer sino evitar aquellas comidas que nos sientan mal...Si los síntomas son muy molestos podemos recomendarle algo pero lo más sensato es evitar aquello que no nos sienta bien.
- Osea que también me voy a quedar con mis molestias...
- Si hace una dieta adecuada, las molestias desaparecerán.
- Pues no me ha animado nada con todo lo que me ha dicho.
- Le he dicho la verdad.
- Pues parece el doctor House en versión femenina.
- Creo que sido amable y correcta con usted, lamento que la medicina tenga limitaciones.
- No está claro es más joven y más guapa que el doctor House.
- Cuídese y que tenga un buen día. Adiós.
- Gracias, adiós.




_ sin comentarios.

jueves, febrero 25, 2010

Días....

Hay días en los que es mejor no levantarse. Días en los que uno es un factor de riesgo para que las cosas se tuerzan. Esos días...Esos días...Uno tiene que bajar los estándares....No le vamos a curar, no le vamos a ayudar...sólo vamos a intentar que siga vivo....Así que como ayer, hoy, esos días suceden cosas...uno tiene que ser amable con uno mismo...amable porque hay cosas que no deben ocurrir...la verdad sigue siendo verdad....uno no debe ir al médico y acabar accidentado en el camino...eso no debe ocurrir...eso es verdad...verdad...y no se puede negar...así que hoy no tengo muchas fuerzas para levantarme mañana pero lo haré...mañana será otro día, otro nuevo día en el que tener fe...fe en que aún en todos los imprevistos, aún en todo lo injusto, aún en todo lo que es difícil...aún ahí, hay vida...aunque solo sea un pequeño suspiro pero hay vida...así que me voy a ir a la cama con la fe en que mañana será mejor,mañana será un nuevo día de gracia....y será amable conmigo misma, con los que me rodean, con los madrileños con paraguas...porque Platón tenía razón....Todos estamos enfrentando una difícil batalla.....

lunes, febrero 22, 2010

LLuvia

Aunque todo el mundo esté cansado de la lluvia, la nieve y el feroz invierno.....yo soy feliz con la lluvia....aunque lo diga en voz baja para que nadie se enfade....Aquí sentada en mi silla de ikea con mi mantita naranja, mi taza azul y el sonido de la lluvia de fondo....soy feliz con ese sonido cerca....Me gusta la lluvia aunque no me gusten los madrileños con paraguas pero me gusta la lluvia.

martes, febrero 16, 2010

Sin cita.

No tenía cita. A veces estas palabras resumen todo. No tenía cita pero fue la paciente más importante del día. Tuvo seis veces más tiempo que los rigurosos cinco minutos que establece el Sistema. Empezó contando vagas quejas y acabo confensando aquello que le preocupa. ¿ Y si algún día faltara ella?. Es una buena pregunta. Es una razonable pregunta. Ella cuida a un paciente que no se puede cuidar. Ella ama. Ama. El amor es sufrido. Ella sufre. Sufre. No lo dice pero lo hace. No habla de ello. Y entonces se abre una pequeña ventana. Tan pequeña que da vértigo mirar por ella. Y entonces dice que es difícil. A veces recibe insultos por lo que hace. ¿ Es el amor tan sufrido?. Nadie define el amor con esas palabras. Insultos. Amor. Suenan tan diferentes. Y ella se rompe. Nadie puede mantener la compostura tras semejante confesión. Se rompe y rápidamente saca el pañuelo. Ella no se permite romperse, al menos en público. Y entonces lo digo. Es usted una luchadora. Lo ha sido siempre y lo sigue siendo pero a veces uno no espera tener que luchar tanto. No espera que sea tan difícil pero lo que hace es extraordinario. Todo lo que hace es excelente. No podemos ayudarla todo lo que nos gustaría pero hace un trabajo arduo con una admirable entrega. ¿ Cómo lo sabe?,¿ Cómo sabe que soy una luchadora?. Le veo a usted y eso me basta. Lo es. Lo soy, he trabajado mucho, toda la vida he luchado pero aún ahora no puedo descansar. Lo sé. Es tan duro, tan duro. Y nos quedamos calladas, hay poco que añadir.

sábado, febrero 13, 2010

Las mañanas de los sábados.

Es la primera mañana de sábado que puedo estar en casa en muchas semanas.Me encantan los sábados por la mañana. Hoy no he puesto el despertador. No me he preocupado de qué ropa me voy a poner al día siguiente o de dejar preparada mi matriushka para llevarme el café por la mañana. Hoy tengo esa sensación del cansancio acumulado, de pocas horas de sueño, de hacer mil cosas y ver mil tragedias. Hoy sólo necesito un poco de bondad. Un poco de fruta fresca. Un yogur de fresa. Un té en una taza de porcelana. Mi pijama azul. Un poco de silencio, un poco de sol. Respirar hondo y sentir que estoy viva. Viva. He escuchado noticias buenas y noticias malas. Lo agrio y lo dulce en partes iguales pero la vida sigue....frágil, intensa, real....hermosa, llena de gracia....y yo hoy he disfrutado de ella, las mañanas de los sábados me acercan a la Vida y me gustan....me gustan mucho.

viernes, febrero 12, 2010

Mi amada biblioteca.

Hay pocos sitios que considere imprescindibles en el barrio. Hay tiendas que me gustan más que otras. Me encanta comprar el pan en la panadería donde una mujer me explica la diferencia entre el candeal y el pan de avena. Me encanta ir a la papelería de arriba donde su dueño escucha la radio como si la vida fuese un programa radiofónico. Me encanta la delicadeza con la que te atienden en Mallorca. Me encanta la tienda en la que venden libretas de colores, me encanta la dueña y su concepción de lo estético. Me encanta el mousse de naranja para la ducha. Me encanta el hombre que sube la compra a mi casa con una sonrisa a pesar de acordarse de todos mis ancestros al cargar los bártulos que he comprado. Me gusta cruzarme con el rabino que camina pausadamente hacia la sinagoga. Me gustan los carteles de cine forum que cuelga una parroquia. Me encantan los escaparates de la iglesia que susurran palabras eternas entre las prisas. Me gusta el cine que está a la vuelta de la esquina. Me gusta la lámpara de los vecinos de enfrente. Me gusta el mercado donde todo está tan colocado, tan elegante que siempre logra que compre algo que no quería comprar. Me gusta la tienda de ropa con puerta de los años treinta y caja registradora a la antigua....pero uno de los sitios que más me gustan va a cerrar sus puertas....Cuando leí el cartel que ponía que estaría más de 2 meses cerrado....algo me oprimió el corazón....la biblioteca va a estar cerrada....ay, qué voy a hacer yo sin poder pasear por sus estanterías....qué voy a hacer cuando ya conozco donde están los libros.....la biblioteca es perfecta....no es nueva, no hay nada especialemente bonito....pero es un clásico....tiene tantas historias que parecen insinuarse entre sus paredes asépticas...Siempre está ahí, a veces pruebo nombres nuevo, a veces acierto, a veces no pero siempre me quedan los clásicos, siempre está Amos Oz en su lugar susurrándome que no corra tanto, siempre está John Berger con su habitual clase, siempre está Dickens diciéndome que la vida no es tan trágica como parece, siempre están Toer y Anna Politkovskaya luchando por la justicia, siempre está C.S. Lewis diciéndome que la Vida está en otra parte....y ahora ellos se van a quedar en cajas de cartón mientras arreglan la biblioteca....y siento que mis queridos amigos estén en cajas de cartón dos meses....tengo ganas de llevármelos a casa de ponerlos en mi estantería para que estén cómodos, para que vean la luz del sol, para que nos hagamos compañía....ay mi amada biblioteca, ¿ qué voy a hacer yo sin ti?....

jueves, febrero 11, 2010

Compromiso.

Muchas veces la gente dice que los médicos no hacemos caso. En ocasiones es cierto. La mayoría de las consultas son por procesos vanales que no requieren un médico sino el paso del tiempo. Hoy he leído una historia anónima. No sé quienes son los protagonistas. Son simplemente siglas pero me han reconciliado con mi profesión.
Una mujer embarazada VIH positivo que no hace controles de ningún tipo.
Un médico anónimo de los que tiene más de 40 pacientes todos los días.
El médico ve en una ocasión a la paciente pero la paciente no quiere ir al hospital. Usa el teléfono para intentar convencerla que es necesario ir al hospital e iniciar así el tratamiento antiretroviral.
La paciente no es receptiva a dicha necesidad.
El médico dedice acompañar a la paciente al hospital para conseguir el tratamiento. Esto por supuesto ocurre en su tiempo libre.
La paciente empieza a tomar las pastillas y se realiza una cesárea.
El bebé está sano, no hay VIH a la vista.
La paciente no puede permitirse comprar leche artificial para evitar la transmisión del VIH.
Los hilos vuelven a moverse y el bebé recibe su leche.



_yo quiero ese compromiso con la vida.

jueves, febrero 04, 2010

El amor.

_para Caperucha, para Sara, por tener fe, por hacer que el amor siga vivo, por hacerme creer...




Hoy quiero contar una historia dulce.
Dulce.
Y no sé qué historia contar.
No sé qué historia contar porque todas las historias dulces tienen algo agrio.

He visto lo agrio.

Lágrimas del otro lado del teléfono.
Palabras entrecortadas.
Suspiros.
Vidas.
Personas.
Familias.
Historias.
Detalles.

Pero donde hay más tristeza o más desgracia, más brilla el amor.

El amor sigue ahí.

Y esa es mi oración, que el amor permanezca.

No importan lo que suceda, el amor está vivo.

Es real.

Tiene caras distintas,
colores distintos,
sobrepasa fronteras.
Sea en Madrid,
sea en Haití,
sea en cualquier lugar.

El amor está vivo.

Y esa es mi oración, que el amor siga vivo,
vivo en mí.

miércoles, febrero 03, 2010

Decálogo de convivencia.

Es una mañana normal. Normal. ¿Se puede usar esa palabra cuando se trabaja con personas?. No lo sé. Mi jersey de pico y mis pantalones no me ayudan a encontrar la respuesta.

Ella viene a la consulta, con sus 75 años bien puestos. Empieza a hablar y habla. Habla, habla y habla. Mi asertividad siempre sufre con alguien de 75 años. Así que esta buena mujer con sus molestias al orinar me cuenta todos los detalles con pelos y señales. En vista de que sigue hablando y ni siquiera coge aire para respirar, no sé cómo explicarle que ya le he entendido. Se me ocurre otro plan. Me levanto para darle un botecito y así analizar la orina. Al ver mi paciente que me levanto, educadamente se levanta. Al levantarse, se acerca a mí y ni corta ni perezosa me coge el borde superior de la bata junto con el jersey de pico de modo que acaba tocándome el escote para que me quede claro lo mal que lo está pasando.
Ante un gesto tan humano, tengo una respuesta muy humana. Doy un paso hacia atrás. Y hago que mi paciente de un paso hacia adelante. Vuelvo a respirar hondo porque nuevamente siento que mi espacio interpersonal está otra vez limitado. Y mi buena paciente sigue hablando, hablando y entre medias me repite que sigue con pinchazos al orinar por lo que se me acerca y toca mi ingle para informarme que le duele ahí. Así que doy un nuevo paso hacia atrás y me dirijo hacia la puerta. Abro la puerta y amablemente mi paciente sale como si todo fuese lo más normal del mundo.


Pocas horas más tarde, viene la siguiente abuelita. Voy a quitarle un pequeño lunar de la tripilla. Preparo todo adecuadamente y me preparo a proceder. En una mano las pinzas, en la otra el bisturí eléctrico. Y cuando me acerco, la dulce abuelita comienza a chillar y ni corta ni perezosa me agarra de la cintura. Conociendo mi hipersensibilidad habitual, pego un salto de modo que el bisturí casi acaba en el suelo. La paciente solo acierta a decir que tenía miedo.


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Lista para la adecuada convivencia con su médico:

1. No me toque el escote.
2. No me toque la ingle.
3. No me toque la cintura.

Las normas se aplican a todo paciente sin excepción.


Ps. Y para terminar el día me han vuelto a preguntar si estoy embarazada....Voy a añadir un cuarto punto: No pregunte a su médico si está embarazada.

miércoles, enero 27, 2010

Imaginación.




Hoy una paciente me preguntó si recordaba la crema que me había dicho....Uhmmmm....Mire, se la he traído para que la vea, era de mi padre....Uhmmmm.....Entonces saca una cajita redonda oxidada con una pasta color marrón oscuro y maloliente.....Mi padre lo usaba para todo, es como agua de mayo lo cura todo....Uhmmmm........Entonces me lo acerca a la nariz lo cual me genera un escalofrío.....Si hacemos cuentas, Flemming descubrió la penicilina en 1928, de aquí a que aparecieron otros antibióticos y se comercializaron en pomada con la 2ª guerra mundial de por medio...Echémosle por lo menos 20 años más....Eso significa que si mi paciente con sus casi 70 años refiere que su padre le dio la crema....pues....a mí me da que la cajita tiene unos 60 años....como esta más duro que una piedra, mi paciente lo calienta en el microondas y luego se lo echa por la piel.....Conclusión....mi paciente sigue viva, lo cual es un milagro y su piel parece haber sobrevivido a todos los posibles efectos adversos....Ver para creer.....

domingo, enero 24, 2010

Los hombres que no aman a las mujeres.

Esta semana he escuchado muchas historias. Muchas personas sufren por causa de otras personas. Y casi siempre que alguien sufre, hay más papeletas para que sea mujer. Seguro que me equivoco en la estadística pero impresiona que las historias más terribles salgan de los labios de las mujeres. Caperucha dice que hay muchos hombres que no aman a las mujeres. Y cuando eso ocurre, hay algo, algo que se rompe...Y cuando se rompe, la violencia se cuela....a veces es sútil....a veces son síntomas vagos....a veces son gestos....o palabras....o más que palabras....pero al final siempre toma forma de mentira...La mentira consiste en creer que no vales nada....no eres nada....no existes.....Y esa mentira es terrible, esa mentira hace que seas un espejismo, una sombra de alguien que no ama a las mujeres....Y maldita mentira, maldito tú por conseguir que ella se lo crea, maldito día....

jueves, enero 14, 2010

Voces.

"-Dígame lo que piensa, madre- supliqué.
- Has contraído un mal típico de los europeos, hijo. Lo quieres todo para ti, tal y como les ocurre a los europeos de los que hablas en tus relatos.
-!Madre!.
- Ése es un mal europeo. ¿No deberías aprender a pensar en los demás? ¿Acaso no te he repetido que debes mostrarte agradecido? No digas nada aún, espera. En una ocasión, me dijiste que cuando los europeos dicen "Gracias", es un simple formulismo. No lo dicen de corazón. Tú te has vuelto como ellos, hijo. Tengo muy presentes tus escritos. El listo hace lo posible por ser más listo, el rico, por ser más rico. Nadie siente gratitud. Todo el mundo está concentrado en prosperar. ¿No es eso lo que tú mismo me has explicado? Todos sufren. Sus deseos e ideales se convierten en monstruos que dirigen sus vidas. ¿Lo recuerdas?.
- Lo recuerdo, madre."



Hacia el mañana. Pramoedya Ananta Toer.



_Por eso tengo que escuchar otras voces.

domingo, enero 10, 2010

Domingo.

Hoy es domingo pero no es un típico domingo. Hoy no habrá música, no habrá palabras sabias, no habrá abrazos, coca-cola o comida rica. Hoy habrá guardia. Suena el despertador y me levanto con poco espíritu. El día está soleado lo que hunde un poco más mi espíritu y decido ponerme las bailarinas para celebrar que yo no celebraré el domingo. Cojo la mochila, el libro de emergencias y me dirijo al metro, todo está en silencio y dormito en el vagón esperando que pronto sea otro día.
La guardia empieza tranquila, me ponen a estudiar RCP lo que supone un infierno cuando no has dormido mucho. Algún que otro aviso sin grandes aspavientos. Me aburro, me aburro mucho. Ojeo los libros pero no logro leer más de un párrafo sin querer estar en otro lugar.

Y entonces, en medio de un domingo cualquiera, empieza a nevar. Nieva con fuerza y mi espíritu comienza a despertar del letargo. Todo se queda blanco. Camino sobre la nieve dejando mis huellas sin pretender o querer. Estoy viva. Las horas pasan y mi guardia de 12 horas llega a su fin. Dejo las bailarinas en la taquilla tristes y solas porque hoy no es su día por mucho que me hayan engatusado con el sol matutino. Vuelvo a casa con un poco más de ánimo, sonrío sin tener un claro motivo pero lo hago. Está nevando. El tren permanece silencioso a excepción de un niño que le pide a su madre sopa, consomé o lo que sea pero caliente para cenar. Sonrío y la nieve sigue cayendo con fuerza.

Llego al barrio, salgo del metro y veo la acera nitidamente blanca. No hay huellas en la nieve. No hay coches en la calle. No hay peatones valientes. Todo está silencioso, blanco y dulcemente tranquilo. Todo está ahí ante mis ojos. Y sin saber porqué me impresiona esa estampa. Todo parece en paz. No hay empujones, no hay palabras bruscas, no hay nada que haga daño. Sólo es hermoso. Mañana la ciudad se colapsará pero hoy es hermosa. Camino mientras juego con la nieve. Llevo el paraguas rescatado de la taquilla, el paraguas que era de ella. Y suena esa canción...What a glorious day, what a wonderful day today, glorious day...Y sin saber porqué digo amén...puede que haya oraciones mejores pero hoy parece que esas palabras son suficientes...la nieve parece decir todo lo que mi lengua no es capaz de articular....What a wonderful day, today....

lunes, enero 04, 2010

Preguntas.

- ¿ Estás embarazada?.
- ¿ Qué le pasa en el escote?.
- ¿ Y cuántos hijos tienes?.
- ¿ Y dónde pasó las fiestas?.


La relación médico-paciente no es bidireccional, no es normal preguntar estas cosas al médico.
Si lo fuera, yo no sería médico.